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La bonanza económica que atraviesa Alemania genera un optimismo entre su población sólo comparable con el que trajo la caída del Muro de Berlín hace 25 años, consideró hoy la canciller, Angela Merkel, al presentar ante el Parlamento en Berlín los planes de su tercer gobierno.
"Los alemanes son tan optimistas como nunca antes desde la caída del Muro", dijo la líder cristianodemócrata (CDU) en un discurso sin grandes novedades en el que repasó los próximos retos del gobierno: lucha contra la eurocrisis, reforma de las pensiones, cambio del modelo energético y defensa de datos en Internet, entre otros.
Todavía en muletas por la fisura de pelvis que sufrió esquiando en diciembre, Merkel fue la primera canciller en presentar sentada los planes de su gobierno ante el Parlamento. Fue frecuentemente interrumpida por los aplausos de una cámara que su nueva coalición de conservadores y socialdemócratas controla en un 75 por ciento.
La canciller defendió el modelo de economía social de mercado como "brújula" del gobierno alemán y estableció cuatro ejes de su tercer gobierno: finanzas sólidas, inversión en el futuro del país, refuerzo de la cohesión social y capacidad de Alemania para asumir su responsabilidad en Europa y el mundo.
En su discurso de una hora de duración, Merkel advirtió que la crisis está controlada pero no superada y repitió lemas que mantiene desde el inicio de la crisis: "A Alemania sólo puede irle bien si le va bien a Europa".
Sobre el abandono gradual de la energía nuclear, la canciller destacó que "ningún otro país del mundo impulsa un cambio de modelo energético tan radical" y confió en que si sale adelante se convertirá en "un nuevo éxito exportador de Alemania".
También estuvo presente en su discurso el escándalo del espionaje estadounidense destapado por el ex agente de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) Edward Snowden. "La confianza es la base de la cooperación con nuestros aliados", dijo en dirección a Washington.
"Nos falta un marco legal internacional para Internet, y en este sentido nos encontramos en un territorio virgen", añadió repitiendo deliberadamente un término ("Neuland", tierra virgen) que el año pasado le valió las burlas de la Red.
La canciller también invocó la "unidad" de la nueva "gran coalición" que su CDU y los socialdemócratas del SPD formaron el 17 de diciembre, repitiendo la misma alianza con la que Merkel gobernó en su primer mandato (2005-2009).