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El obispo emérito de la ciudad brasileña de Goiania y fundador de la Pastoral de la Tierra, Tomás Balduino, murió hoy a la edad de 91 años a raíz de una embolia pulmonar, informan medios locales.
El religioso dominicano, quien también impulsó la creación del Consejo Indigenista Misionario (CIMI), estaba internado desde el 25 de abril en el hospital Neurológico de la capital del estado de Goiás.
Nacido en la ciudad de Posse, en el norte del estado de Goiás, Balduino cursó estudios de filosofía en Sao Paulo y realizó un doctorado en Teología en Saint Maximin, en Francia.
Comenzó a interiorizarse con la realidad de los indígenas de su país cuando fue designado prelado en la diócesis de la ciudad de Conceicao do Araguaia, en el amazónico estado de Pará.
Con el fin de poder llevar adelante un trabajo eficaz con los indígenas de la región, Fray Tomás, como era llamado el religioso, realizó una maestría en Antropología y Lingüística en la Universidad Nacional de Brasilia, la cual concluyó en 1965.
Fue en la región amazónica en la que Balduino comenzó a defender la causa de los indígenas, luchando contra la ocupación de sus tierras por parte de empresas del sector agropecuario.
En 1972, cuando ya se desempeñaba como obispo diocesano de Goiás, fue pieza clave en la creación del CIMI, organismo vinculado a la Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil (CNBB) que lucha por garantizar los derechos de los nativos, tanto en lo que respecta a la posesión de tierras como al respeto a sus culturas.
Tres años después, y continuando con su trabajo a favor de los más desfavorecidos, Fray Tomás ayudó a fundar la Pastoral de la Tierra, entidad que también está vinculada a la CNBB a través de la Comisión Episcopal para el Servicio de la Caridad, la Justicia y la Paz.
Sus funciones están relacionadas con la defensa de los derechos de los trabajadores rurales y campesinos sin tierra, y con la lucha por la reforma agraria.
Su persistente trabajo con los más pobres le valió además reconocimiento internacional. El Oklahoma City National Memorial Foudation le otorgó en 2008 el premio "Reflections of Hope", por considerar que sus acciones son ejemplos de esperanza para la solución de las causas que provocan la miseria de tantos millones de personas en el mundo.
La presidenta brasileña Dilma Rousseff expresó a través de su cuenta en Twitter (@dilmabr.com), su "tristeza" por la muerte del "incansable luchador de las causas populares".
La mandataria recordó que el religioso fue "una figura destacada en la oposición al régimen militar" que gobernó al país entre 1964 y 1985, y "un defensor intransigente de los derechos de los indios, los trabajadores sin tierra y los más pobres".
Su cuerpo es velado en la iglesia San Judas Tadeu, en Goiania, hasta el domingo, cuando será trasladado a la ciudad de Goiás. Allí será sepultado en la catedral, el lunes.