EFE
La ONU felicitó este martes a Jordania, Libia y Túnez por haber derogado leyes que permitían a los violadores evitar procesos penales si contraían matrimonio con sus víctimas, y señaló que se trata de decisiones que coronan "años de esfuerzos de los activistas de los derechos humanos" en estos países.
"Castigar a la víctima de una violación obligándola a casarse con aquel que le ha infligido un crimen atroz es una idea intolerable y que no tiene lugar en el mundo actual", declaró el alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein.
En este sentido, encomió la decisión de los legisladores de los tres países al eliminar la violencia contra las mujeres y garantizar que los culpables respondan por sus actos ante la justicia.
En Libia, la ley que quedó sin efecto el pasado día 16 preveía que una persona acusada de violación y que aceptaba casarse con su víctima no podía ser denunciada, mientras que Jordania una norma similar fue anulada el 1 de agosto.
Túnez decidió ir más lejos y el Parlamento adoptó el pasado 26 de julio una amplia ley para la eliminación de la violencia contra las mujeres y contra a impunidad de los responsables, que comprende no sólo la violencia sexual o física, sino también la económica, política y psicológica.
Esta ley entrará en vigor en 2018 en Túnez, donde también acaban de crearse dos instituciones de defensa de los derechos humanos especializadas en el ejercicio de las libertades individuales y en las garantías de igualdad.
Sin embargo, Zeid mencionó que Libia todavía tiene leyes que revisar, como la que permite a una persona acusada de mantener relaciones sexuales con un o una menor de edad escapar a la justicia si se casa con su víctima, mientras que un artículo del Código Penal vigente autoriza la violación dentro del matrimonio.
"Invito a los pueblos de estos países, así como a países en otras regiones, que aprovechen este impulso para avanzar en la anulación de leyes que justifican la violencia sexual contra las mujeres y niñas", dijo Zeid.
2017-08-22