Ibis León
Las encuestas más optimistas indicaban que la Mesa de la Unidad (MUD) obtendrían la primera mayoría calificada -es decir las 3/5 de las curules o 101 diputados- pero de acuerdo con los resultados ofrecidos por la tolda de oposición, todo parece indicar que serán más: aseguran que conquistaron las 2/3 partes del parlamento o lo que es lo mismo, la segunda mayoría calificada.
Si esto llega a concretarse -el órgano electoral aún no da el parte oficial de las 22 curules que faltan- significa que obtuvieron la mayoría más alta que podría tener para tener una influencia contundente sobre el Ejecutivo y el resto de los poderes públicos. Esto se explica en el creciente malestar social y el acelerado empobrecimiento de la población, indican los expertos.
“El malestar social se impuso sobre el miedo (…) La alta participación explica que la gente vio el voto como el instrumento más eficaz para comunicar su descontento”, opinó el analista político John Magdaleno.
La razón por la cual el gobierno no logró la mayoría a pesar del ventajismo expresado durante la campaña electoral es la combinación entre la inflación, la escasez y el desabastecimiento, indicó el experto.
“La sociedad le envía un mensaje al gobierno y al partido oficial: el discurso de la guerra económica no logró persuadir a la mayoría de los electores, no resulta ser una explicación verosímil y, por tanto, el chavismo tendrá que restructurar su discurso, su estrategia de fondo y su política económica”, manifestó.
Durante la contienda electoral, era común ver a los candidatos del chavismo acompañar al presidente Nicolás Maduro en inauguraciones de obras, en entrega de viviendas, en mercados a cielo abierto, etc. Esto, a su vez, era reforzado constantemente por el discurso presidencial en el que se repetía una y otra vez que la oposición eliminaría las misiones sociales y establecería programas neoliberales.
Incluso los medios públicos del Estado trasmitieron la campaña “No te dejes engañar” en la que se presentaba una serie de micros en los que se mostraba a los diputados de la MUD rechazar los créditos adicionales que aseguraban serían destinados para las misiones.
Pese a esto, la tendencia no se revirtió. La oposición obtuvo mayoría en la Asamblea Nacional porque la elección se interpretó como un plebiscito señaló el consultor político, Edgar Gutiérrez.
“El 6D la elección tuvo muy poco de parlamentaria y mucho de plebiscitaria (…) Pudimos ver que aunque el chavismo sacó más votos de lo que se esperaba, cayó en participación en sectores emblemáticos, incluso una parte chavista votó por el cambio”, declaró.
La alta participación registrada de 74% está directamente asociado a este aspecto.
El analista coincidió en que la crisis económica pudo más que la amenaza contenida en el discurso oficial y terminó concretándose en los resultados. “El sistema electoral venezolano tiene muy poco aprecio por el ganador y mucho desprecio por el perdedor, y el chavismo recibió esta cucharada muy amarga el día de ayer”, dijo.
Retos y panoramas
Hay dos posibles escenarios: la intensificación de la confrontación o la mediación. Los expertos consultados señalaron que el enfretamiento podría socavar aún más las bases del chavismo.
“El gobierno ya reconoció los resultados en su discurso, ahora debe reconocer que su política es equivocada y abrir el diálogo con diversos sectores para hacer las reformas y los cambios que tenga que hacer”, dijo Gutiérrez.
La MUD también tiene un principal reto: trascender de una coalición electoral a una política en la que se mantenga la agenda única y administrar el poder en función de la mejora social y económica.
2015-12-08