Madeleine A. Navas R.
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Pese a que el Ejecutivo "adelantó" la Navidad, la crisis condiciona la época, y son muchos los que aún no sienten el ambiente de fiesta. Algunos no se han dado cuenta que llegó, mientras otros prefieren ignorar estos días.
"No sabía que era Navidad"; es así como Ángel Sucre, un mártir más de la situación actual del país responde a "¿Se siente la Navidad?". Afirma que, anteriormente, en septiembre ya se respiraba el ambiente navideño.
Le da risa imaginar en qué invertirá el dinero, puesto que asegura que no alcanza para nada.
"Anteriormente podías comprarte la ropa del 24, del 31 y hasta del 1 de enero. Quizás pensabas en comprar un regalo. ¿Amigo secreto? Creo que este año no existirán esos detalles".
Quehaceres de Navidad
No hace mucho tiempo, los venezolanos dejaban los lujos para diciembre. Viajar, pintar la casa, comprar ropa y zapatos, regalos a familiares y otros gastos, para este año no se ven venir. El venezolano de hoy tiene que desprenderse, de alguna forma, de sus costumbres.
Fecha simbólica
El sociólogo Francisco Coello asegura que este mes es representativo para la población. "Es tan importante que no es casual que el Gobierno desde hace un mes está tratando que la gente se meta en ese ambiente navideño; pero difícilmente lo va a lograr porque el propio Gobierno genera problemas políticos, económicos y sociales, y la gente está preocupada por otras cosas". Afirmó que para esta época la mayoría de los connacionales se "desconectaban" puesto que estaban pensando cómo arreglar su casa o planificar las visitas a sus familiares.
Manos vacías
No solo Ángel Sucre se siente desanimado. El país entero recibe las navidades a duras penas, con la despensa vacía, los adornos reciclados de años anteriores, y sin ropa que estrenar. La crisis ha apagado la fecha más brillante del año.
Muchos reclaman que no hay un ambiente festivo ni ánimos de vestirse para ello. Señalan algunos sectores que intentan hacer llegar la alegría de esta época a los hogares que "pocas panaderías tienen pan de jamón, aunque a esos precios, nadie podrá comprarlos". Pero también precisan que ese será el único elemento del plato navideño que es "seguro" en el país.
Jugueterías en jaque
La Mesa de la Unidad (MUD) hizo una encuesta en el mes de noviembre con el fin de verificar qué harán los venezolanos en estas fechas. Uno de los encuestados afirmó que lo que su hijo le pidió de "Niño Jesús" fue una bicicleta, y está fuera de sus posibilidades.
En esa misma encuesta, Gustavo Rojas, encargado de una juguetería, sostuvo que el entusiasmo de la gente es muy poco, y que todos los años los niveles de venta bajan, pero los precios suben; y que cada año llegan menos juguetes y de menor calidad.
Adornos "en paro".
El encargado de una tienda de Navidad en el centro de Caracas, que prefirió dejar su nombre en reserva, afirmó que ve imposible que una persona pueda comprar arbolito, luces y demás adornos "de un solo golpe", puesto que los precios están elevados y no ve fácil tener todo nuevo en esta ocasión. "Aunque tenemos mercancía nueva, las ventas están flojas", declaró. Las tiendas especializadas reciben personas que, en su mayoría, solo miran y se van.
Política devastadora
El sociólogo Coello asegura que "el que un niño no pueda recibir un juguete o estrenar, es una realidad terrible, y es parte de una cadena. Ese tipo de cosas que son simbólicas, emocionantes y que marcan la primera etapa de la vida, son claves", y añade que la familia también se ve afectada, "que unos padres no puedan darse el gusto de obsequiarle algo a su hijo en Navidad, es terrible, son cosas que tienen que ver con nuestra vida cotidiana, con nuestros afectos y que indican cómo esta política hace miserable la vida de las personas".
Fotos: Mairet Chuorio
2016-11-30