Perú envió el martes 1.200 soldados a su frontera con Ecuador para impedir el ingreso de migrantes venezolanos sin documentos en medio de una segunda ola de infectados por el COVID-19.
El Comando Conjunto dijo en su cuenta de Twitter que los militares reforzarán la vigilancia en “más de 15 puestos de control” que Perú tiene en 158 kilómetros de frontera con Ecuador.
Imágenes en las televisoras locales mostraban el despliegue de soldados a través de la ciudad peruana fronteriza de Tumbe. En más de medio centenar de vehículos militares.
Los migrantes huyen de una prolongada crisis económica en Venezuela que se ha acentuado debido a la pandemia del nuevo coronavirus. Perú es el segundo destino en el mundo para los venezolanos, después de Colombia.
La prensa local muestra con frecuencia vídeos de ingresos de venezolanos sin documentación en regla, entre los que se encuentran mujeres embarazadas y niños. Muchos llegan hasta Tumbes, la ciudad peruana fronteriza con Ecuador, en camiones y al caer la tarde.
La frontera entre Perú y Ecuador es poco resguardada. Incluye amplios sectores de campos de cultivo y unos 38 kilómetros de un canal de concreto para el paso de agua donde delincuentes peruanos construyen “puentes”. Además, de cobrar cinco dólares por venezolano que busca ingresar a Perú, según las autoridades.
El jueves la policía peruana intervino a 493 venezolanos que ingresaron a Perú en diversos puntos de la frontera con Ecuador, indicó el jefe policial de Tumbes, general Luis Gamarra.
Según datos oficiales, más de un millón de venezolanos viven en Perú y la mayoría trabajan en diversos oficios.
Con información de AP.
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