Las modelos provocadoras de Gucci, la elegancia realista de Max Mara y la influencia escocesa de Bluegirl protagonizaron los primeros grandes desfiles de la Semana de la Moda de Milán.
Los diseñadores mostraron en la pasarela italiana sus colecciones para el próximo otoño/invierno.
Al frente de Gucci, Frida Giannini se inspiró en el artista pop británico Allen Jones, cuyas obras tienen a menudo una fuerte relación con el erotismo y el fetichismo.
"La mujer de Gucci es de hierro pero sexy. Aúna su disciplina con los vicios de un ‘femme fatale'", explicó Giannini, que mostró su colección la noche del miércoles. Sus vestidos para la próxima temporada se ajustan al cuerpo y tienen cuello alto, mientras que las faldas lápices de talle alto llegan hasta las rodillas. El cuero aparece en todas sus variaciones y la paleta se llena de colores oscuros alrededor del negro, como el óxido, el verde musgo o el azul oscuro.
Max Mara se centra en los abrigos, según su costumbre. Los nuevos modelos de la casa italiana tienen en ocasiones cortes generosos y grandes capuchas. Sobre la pasarela de Milán desfilaron hoy modelos monocromáticos, en beige o marrón. Los pantalones de pata ancha completan una colección elegante pero realista.
Por su parte, Bluegirl se dejó inundar por la influencia escocesa. Los kilts se combinan con blusas con cuellos de babero, jerseys de bordados y chaquetas de piel. Los cuadros escoceses aparecen también como sutiles estampados en otras prendas.
Bajo la marca Les Copains, el diseñador Alessandro dell’Acqua mostró también hoy mucho mohair y angora, con pullovers mullidos con estampados gráficos que se combinan con faldas de brocado./DPA