Siete personas han muerto y dieciocho han resultado heridas a raíz de que un hombre hiciese explotar un coche cerca de la vivienda en la que, presuntamente, se encontraba su ex mujer, situada en la ciudad de Zhanjiang, en la provincia meridional de Cantón.
La explosión se produjo ayer en el distrito de Potou de la citada ciudad, informa la agencia oficial Xinhua.
De las siete víctimas mortales, tres sucumbieron en el acto y las otras cinco han fallecido en el hospital, mientras 18 personas se encuentran heridas, cinco de ellas en cuidados intensivos.
El sospechoso, un hombre de alrededor de 50 años apellidado Chen, está entre los heridos críticos y, según la citada agencia, se encuentra en coma.
Las primeras pesquisas policiales indican que Chen advirtió a la policía de que iba a conducir el vehículo hasta el lugar del incidente, donde de forma deliberada detonó los explosivos que había construido él mismo.
La explosión se produjo a las puertas de la casa de la hija mayor de la última esposa de Chen, quien se había divorciado de él, y se presupone que la mujer también se encontraba allí por el Año Nuevo.
Chen habría buscado vengarse de su ex mujer debido a una disputa mantenida acerca de la tutela de los hijos comunes.
La mayoría de las víctimas eran parientes de la mujer, si bien se desconoce aún si ésta es una de ellas, por lo que la policía asegura que continuará investigando el caso. EFE