AP
Trece personas alrededor de Irak murieron el domingo a causa de atentados con autos bomba y tiroteos, dijeron autoridades.
Además, milicianos vinculados con al-Qaida secuestraron a soldados en una provincia donde los extremistas controlan las dos principales ciudades.
El subjefe de policía de Kirkuk Torhan Abdul-Rahman Yussef dijo que tres autos bomba explotaron simultáneamente en diferentes vecindarios. Los estallidos causaron la muerte de cuatro personas y heridas a 14, dijo.
La ciudad de Kirkuk está a 290 kilómetros (180 millas) al norte de Bagdad, la capital iraquí.
En Bagdad, la policía informó que hombres armados mataron a un ex oficial del ejército y a su esposa, y descubrieron otros tres cadáveres. Todos fueron asesinados a tiros a corta distancia y estaban amarrados de pies y manos.
La noche del domingo un auto estalló frente a una mezquita suní en el área de Mishahda, causando la muerte de tres personas y heridas a 13 más, dijeron la policía y autoridades hospitalarias.
Mishahda está 30 kilómetros (20 millas) al norte de Bagdad.
Más tarde, la policía dijo que hombres armados atacaron un puesto de seguridad en el oeste de la capital y mataron a cuatro soldados.
En tanto, las fuerzas de seguridad y extremistas vinculados con al-Qaida continuaban sus enfrentamientos cerca de una ciudad al oeste de Bagdad, según autoridades locales y militares en la provincia de Anbar, en el oeste del país.
Las autoridades dijeron que los choques comenzaron en la zona de Niamiya, cerca de Faluya, que insurgentes ocuparon hace varias semanas. Los extremistas de al-Qaeda capturaron a varios soldados iraquíes durante los enfrentamientos del domingo, agregó.
Todas las autoridades solicitaron el anonimato porque no estaban autorizadas a hacer declaraciones a la prensa.
Desde finales de diciembre, miembros de la rama de al-Qaida en Irak, conocida como Estado Islámico de Irak y el Levante, controlan Faluya y algunos sectores de la ciudad cercana de Ramadi.
Desde entonces, las fuerzas del gobierno y sus aliados de diversas tribus intentan recuperar el control de esas zonas en poder de los extremistas, agregó.