EFE
Un destacado líder rebelde del Movimiento Islámico de los Libres del Sham (Ahrar al Sham) murió hoy en un atentado suicida en Alepo (norte de Siria) perpetrado por un miembro del extremista Estado Islámico de Irak y el Levante, afirmó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
La ONG informó también de la muerte de otras 19 personas en bombardeos y enfrentamientos con fuerzas leales al régimen sirio en las provincias de Alepo y Deir el Zur (este).
En un comunicado, la ONG indicó que siete rebeldes de la brigada Ahrar al Sham, entre ellos el cabecilla identificado como Jaled al Suri, que combatió contra los estadounidenses en Afganistán e Irak, perdieron la vida en un atentado suicida en Alepo, capital de la provincia del mismo nombre.
El ataque fue perpetrado por un miembro de la agrupación extremista Estado Islámico de Irak y el Levante en la sede del movimiento islamista, en el barrio de Al Halak.
Mientras, en el área de Al Ansari, fallecieron dos adultos y una niña en ataques aéreos.
Además, el Observatorio señaló que diez rebeldes perdieron la vida, entre ellos tres dirigentes de grupos combatientes islamistas, en choques con fuerzas del régimen sirio en los alrededores del aeródromo militar de Deir el Zur, en el este de Siria.
Por otro lado, habitantes de la ciudad de Jan Shijon, en la provincia de Idleb, en el noroeste de Siria, han comenzado a huir a los alrededores, después de que trece milicias rebeldes anunciaran que lucharán unidas para poner fin al cerco de esa localidad y cortar la línea de abastecimientos que llega de la vecina provincia de Hama.
Entre esos grupos figuran el Frente al Nusra, vinculado a Al Qaeda, el Frente de Revolucionarios de Siria y Ahrar al Sham.
Asimismo, el Observatorio informó de que nueve agrupaciones insurgentes, entre los que también se encuentran el Frente el Nusra y Ahrar al Sham, anunciarán en un comunicado una alianza para combatir en las zonas rurales de la provincia meridional de Deraa.
Esa unión se produce, según ellos, en respuesta a los bombardeos que el régimen lanza con artillería y barriles explosivos contra localidades de la zona de Houran y en represalia por los mártires.
La guerra en Siria, que arrancó en marzo de 2011 con una serie de protestas contra el Gobierno, ha causado unos 140.000 muertos, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.