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Cuando suela el reloj biológico, las ganas de ser madre se hacen presentes y es allí es cuando se debe comenzar a trabajar en lo necesario para cumplir dicho propósito. Puedes comenzar a consumir alimentos que te ayuden a concebir más rápido. Aquí te dejamos una selección de alimentos que te ayudarán para que tengas la fertilidad que necesitas.
Granos
Los especialistas recomiendan consumir granos integrales, ya que son la mejor opción ya que los convencionales, tales como el pan blanco, la pasta o el arroz, si bien no retrasan de forma directa la concepción, afectan a tu cuerpo en dicho proceso.
Frutas
Altamente llenas de vitaminas con abundantes minerales y micronutrienentes. Estos últimos suelen verse afectados por los radicales libres, unas sustancias nocivas que ocasionan agentes contaminantes como el humo de los carros o los rayos del sol y que al entrar al organismo pueden dañar los órganos reproductores, óvulos y espermatozoides.Las frutas que deben comerse son: la naranja, el kiwi, ciruela, durazno, fresa, mora, entre otros.
Vegetales
Debes comer en esta etapa: ajo, coliflor, brócoli, plátano verde, espinaca y el pimentón rojo. Ten en cuenta que mientras más intenso sea el color, más nutrientes tendrá la verdura. Puedes preparar una crema y agregarle alguna de las que hemos mencionado. Si eres de las que no disfrutan el sabor de las verduras, hay muchas maneras de prepararlas para que las sazones a tu gusto, por ejemplo, en puré o al vapor.
Pescado
Los ácidos grasos omega 3 son un complemento fundamental para mejorar tu nivel de fertilidad y el pescado contiene mucho de ese componente.
Sin embargo, hay pescados que debes evitar, como la carne de tiburón, el pez espada, sierra y los filetes de atún, ya que contienen mercurio, una sustancia que afecta de forma directa el proceso de fertilidad. Puedes optar por langostinos, atún claro enlatado, bagre o salmón.
Linaza
Es excelente para proporcionarle ácidos grasos omega 3 a tu cuerpo. Si eres vegetariana, entonces puedes agregar perfectamente algunas semillas a tus comidas o bebidas.
También puedes utilizar aceite de linaza para preparar ensaladas o cualquier comida a la que suelas agregarle aceite, pero recuerda que no debes cocinar con él, pues perderá todos sus nutrientes al calentarse.
Carnes rojas
El consumo de hierro es sumamente vital para evitar enfermedades como la anemia. Por esta razón, es recomendable comer carnes rojas al menos dos veces por semana.
Si eres vegetariana, debes consultar con tu médico la ingesta de algún suplemento vitamínico que le proporcione el hierro necesario a tu cuerpo, pues una vez que empiece la gestación, el bebé consumirá más de la mitad de las vitaminas y minerales que recibas.
El maní
Contiene grasa, proteínas, vitamina A y ácidos grasos. Aumenta el libido, por la cantidad de zinc que produce y la grasa, que sirve para incrementar el bienestar de las mucosas y mejorar el estado y la frecuencia de la ovulación. Puedes comerlo agregando aceite de maní a alguna de tus ensaladas, en mantequilla de maní o simplemente comiéndolo como un aperitivo para, además, calmar la ansiedad.
La nuez
Contiene ácidos grasos omega 3 y micronutrientes. Es buena para la fertilidad en la mujer, pero si tu pareja también la agrega a su dieta, hará un mejor trabajo, pues un estudio realizado en la universidad de California en los Ángeles (UCLA) demostró que la nuez mejora la calidad espermática, en cuanto a movilidad, concentración, forma y características cromosómicas se trata. Además, achica la producción de aneuplodía, que es la capacidad de generar más cromosomas de lo normal causando mal formación en el feto.
Semillas de girasol
Tienen propiedades que contribuyen con la fertilidad: Vitamina B1, potasio, magnesio, ácidos grasos, ácido fólico, calcio que previene la malformación del feto y evita la osteoporosis. Las semillas de girasol no tienen ningún efecto secundario, así que puedes comerlas cuantas veces quieras.