Evidentemente no existe nada más divertido y hasta saludable que una visita a la playa, pero por razones obvias, en la actualidad, esto es cada vez menos posible porque hay restricciones debido a la pandemia.
Si te encanta lucir una piel bronceada, se sugiere recurrir a lo que hace 15 años aproximadamente estuvo de moda, las cabinas UVA y las cremas autobronceadoras, por ejemplo.
Solución
Debido al gran atractivo que genera el cuerpo bronceado y al no poder visitar constantemente la playa, muchos son los gimnasios y centros de belleza que han incorporado en sus opciones de servicio, lámparas de rayos ultravioletas tipo A (UVA) ofreciendo un bronceado instantáneo, intenso e “inofensivo”.
¿Cómo funciona?
La luz ultravioleta actúa como catalizador y el pigmento que se encuentra en la piel, llamado melanina, funciona como mecanismo de defensa, produciendo el bronceado en la epidermis, es decir, solo en la capa más externa de la piel.
Beneficios
– Es recomendado por algunos dermatólogos para el tratamiento de la soriasis y el acné.
– Disminuye las condiciones del reuma y la artritis.
– Ayuda a fortalecer huesos y músculos, y previene o estabiliza la osteoporosis.
– Ayuda al cuerpo a producir vitamina D.
– Está indicado en cualquier hora o momento del día.
Ventajas
– El tiempo de exposición debe estar definido y controlado.
– Evita las quemaduras de la piel por el uso de filtros que se ajustan a la necesidad de cada persona.
– No depende de factores como la capa de ozono, el clima o las oscilaciones de la radiación solar, proporcionando un bronceado integral y uniforme.
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Toma en cuenta
– Si estás tomando medicamentos debes asegurarte que éstos sean compatibles con la radiación ultravioleta (consulta con tu médico antes de tomar la decisión de asistir a estos centros de bronceado artificial).
– No uses rayos UVA si tienes antecedentes familiares o personales de cáncer de piel.
– No sobrepases las 20 ó 30 sesiones al año.
– Protege los ojos con unas gafas adecuadas.
– Toma las sesiones con un intervalo de 48 horas.
– Evita la exposición al sol después de utilizar el bronceado artificial.
– Si vas a recibir los rayos UVA, evita el uso de maquillaje, perfume o cremas.
– Este tipo de bronceado no es recomendado para los menores de 18 años, personas que tienen muchos lunares y manchas de piel, embarazadas y personas de pieles muy claras.
En exceso
Estudios sugieren que, al igual que la exposición al sol, el uso a corto plazo de cabinas bronceadoras, puede conducir a los mismos daños genéticos y moleculares que causan cáncer. Por tanto, la idea es no abusar y solo utilizarlas en contadas ocasiones.
Otra opción
Las cremas autobronceadoras te permiten lograr una piel bronceado en pocas horas sin necesidad de exponerse al sol o a los UVA artificiales.
La dihidroxicetona (DHA) es la sustancia responsable de este efecto, actúa al ponerse en contacto con los aminos libres de las proteínas cutáneas y produce una reacción química que colorea la superficie de la piel, haciéndolo apto para personas de piel clara y sensible.
Antes de aplicar este tipo de cremas, se sugiere probar en una pequeña parte del brazo o la pierna, para constatar que no causa alergias; una vez verificado, debes exfoliar la piel para luego aplicar la crema bronceadora y conseguir un color uniforme.
2021-04-21
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