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Samsung lanzó el lunes su nuevo teléfono multiusos, el Galaxy S5, enfatizando más su monitor cardiaco y mejorada cámara que las dimensiones ligeramente mayores de su pantalla.
Uno de los atractivos principales de los teléfonos de Samsung ha sido su tamaño. La pantalla ha crecido constantemente desde los 10,2 centímetros (4 pulgadas) del original S del 2010, mientras que el iPhone llegó a esas dimensiones apenas en el 2012 y ahí ha seguido.
Pero el S5 apenas aumenta las dimensiones de su pantalla a 13 centímetros (5,1 pulgadas), de los 12,7 centímetros en el S4. En lugar del tamaño, Samsung pregonó la capacidad del nuevo teléfono de adaptar su pantalla a cambios en las condiciones externas, y de oscurecerla para evitar molestar a otras personas.
El teléfono tiene una cámara de 16 megapíxeles, comparado con 13 megapíxeles de su predecesor. Promete una función de autoenfoque más rápida y la capacidad de difuminar el trasfondo o el primer plano de una imagen para destacar a un sujeto.
Samsung Electronics Co. hizo el anuncio durante el Congreso Mundial de Móviles en Barcelona, España.
El nuevo teléfono saldrá a la venta a escala global el 11 de abril. La compañía no anunció el precio. El S4 se vendió por aproximadamente 600 dólares sin subsidios o contratos.
El S5 tiene un sensor de huellas dactilares para usar en lugar de contraseña para desbloquear el teléfono o hacer pagos a través de PayPal. Es una capacidad aún rara en celulares, aunque Apple la introdujo en el iPhone 5s a finales del año pasado.
La serie Galaxy S de Samsung ha emergido como uno de los desafíos más grandes para el iPhone y ha ayudado a la compañía sudcoreana a superar a Apple como la mayor productora de celulares en el mundo. De acuerdo con Gartner Inc., que monitorea el sector tecnológico, los teléfonos multiusos de Samsung tuvieron una participación de mercado el año pasado de 31%, comparado con 16% para los iPhones.
Una queja sobre los teléfonos de Samsung ha sido la tendencia de la compañía a cargarlos con un montón de capacidades, algunas de las cuales no funcionan bien con otras. Teléfonos recientes han tenido el Modo Fácil, con íconos más grandes y menos opciones de personalización. Es como si Samsung reconociese que sus teléfonos se han vuelto difíciles de usar para algunas personas.
Samsung mostró moderación esta vez.
"Samsung está apostando a la salud, la detección de huellas dactilares y el autoenfoque de la cámara, al tiempo que mantiene aspecto y funcionalidad muy similares para su teléfono y el software", dijo Nick Dillon, analista para la firma Ovum. "Las actualizaciones son tan menores que, a primera vista, muchos consumidores tardarían en notar qué ha cambiado respecto a la versión anterior".
Lunes 24/02/2014