2001online.com | EFE
Florida anotó 2.564 casos y 38 muertes más por COVID-19 en las últimas 24 horas en medio del empeño por lograr que este fin de semana largo, con más turistas y más tiempo para el ocio, no haga repuntar la progresión de la pandemia, sobre todo en el sur del estado.
Solo California y Texas tienen más que los 646.431 casos confirmados desde el 1 de marzo que ha registrado Florida, que acumula además 12.001 muertes por la enfermedad (11.849 de residentes y 152 de no residentes).
Este domingo hubo 40.024 ingresos a hospitales en Florida por la COVID-19.
Carlos Giménez, alcalde de Miami-Dade, y su colega del vecino condado de Broward, Dale Holness, advirtieron a la población para que no olvide las normas vigentes para prevenir los contagios, especialmente el uso de mascarillas y la distancia de seguridad con otras personas, y recordado que los infractores pueden ser multados.
El objetivo es no tener que lamentar una recaída después de este fin de semana largo, ahora que la COVID-19 parece por fin estar bajo control en el sureste del estado, la zona más afectada por la pandemia.
Hasta este domingo Miami-Dade acumula 161.363 casos y 2.655 muertes desde el 1 de marzo, y Broward, 73.293 y 1.215, respectivamente.
Giménez dijo que no quiere que ocurra lo que pasó en el Día de los Caídos (Memorial Day), a fines de mayo, cuando hubo un relajo general en el cumplimiento de las normas, a lo que luego siguió un notorio aumento de los casos.
En Miami-Dade sigue vigente un toque de queda desde las 10 de la noche y multas de 100 dólares para los particulares y de 500 para los negocios que incumplan las normas anticontagios.
Las playas en el condado se mantienen abiertas, al contrario que el pasado 4 de julio, pero en algunas se han limitado los lugares de estacionamiento de vehículos como manera de reducir la afluencia y solo se pueden formar grupos de 10 personas.
2020-09-06
Para mantenerte informado sigue nuestro canal en Telegram https://t.me/Diario2001Online