Cuarenta días antes de su boda, su única hija les anunció que finalmente no iba a casarse. Sin embargo, Willie y Carol Fowler pronto lo tuvieron claro. Ya habían pagado los gastos del banquete y lo que hicieron fue cambiar la lista de invitados.
“Cuando al día siguiente mi marido se despertó yo estaba cancelando todo lo que habíamos contratado, pero él me dijo: No, lo que haremos es dárselo a ‘Hosea Feed the Hungry’”, relató Carol Fowler a ABCNews.com.
"Fue una visión”, indicó la mujer que contó que su marido rezó aquella noche y fue Dios quien le indicó lo que debían hacer. De hecho su hija fue voluntaria en la ONG ‘Hosea Feed the Hungry’ cuando era pequeña. No obstante, en la ONG al principio pensaron que se trataba de una broma. Los Fowler tuvieron que ir a visitarles y contarlñes su idea para que finalmente les creyeran.
La comida se celebró en el complejo hostelero de lujo Villa Christina, en Atlanta, Estados Unidos. El evento comenzó hacia las dos de la tarde con un cóctel al aire libre, mientras que los niños aprovecharon para correr y jugar. Luego pasaron a los salones para disfrutar del almuerzo, compuesto por cuatro platos, entre ellos salmón y pollo.
Los Fowler participaron en el evento y estuvieron saludando a sus invitados. Su hija también estuvo junto a ellos en el día en el que, en un principio, iba a casarse, pero se sintió muy agradecida por la decisión de sus padres de ofrecer su banquete a personas necesitadas, en lugar de tirarlo.
Los Fowler quieren hacer de su acción un acontecimiento anual, de dos días de duración, en el que además pretenden incorporar talleres de educación. Saben que al año se cancelan muchas bodas y quieren animar al resto de personas a compartir lo que tienen con los más necesitados, en lugar de tirarlo a la basura.
“El evento ha demostrado que cuando una comunidad vive en armonía puede marcar la diferencia”, ha dicho Elizabeth Omilam, directora de ‘Hosea Feed the Hungry’./TeInteresa
Miércoles 25/09/2013