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No todos los psicópatas son criminales, pero todos ellos tienen en común algunos rasgos, principalmente la falta de empatía y la impulsividad. Tradicionalmente, se pensaba que era precisamente esa incapacidad para empatizar con el resto de las personas, la causa principal de sus peculiares comportamientos. Pero, ahora, una nueva instigación realizada por la Universidad de Harvard ha descubierto otra razón.
Los investigadores escanearon el cerebro de cincuenta reclusos que habían cometido delitos violentos, y a los que se les habían diagnosticado tendencias psicopáticas. A todos ellos se les sometió a una prueba en la que se les ofrecía la posibilidad de elegir entre obtener una recompensa económica en un plazo de tiempo casi inmediato, u otra mucho mayor, pero para la que tendrían que esperar más. Y el resultado fue que la mayoría de ellos se decantaron por la primera opción.
Los investigadores comprobaron que las conexiones neurológicas de una región del cerebro vinculada con la posibilidad de intuir el futuro y deleitarse con el placer venidero, eran diferentes a las del resto de personas.
La conclusión que parece arrojar el estudio, es que las personas que sufren psicopatía solo encuentran placer con las recompensas inmediatas, lo que es uno de los detonantes de sus conductas impulsivas.
Evidentemente, ese estudio no revela de forma absoluta el gran misterio que encierra la mente de un psicópata, pero añade una pieza más para poder ir construyendo en su totalidad ese enigmático puzle.
2017-07-10