La condena a muerte de un líder del mayor partido islámico de Bangladesh por crímenes de guerra cometidos durante el conflicto con Pakistán en 1971 desató hoy violentas protestas que dejaron al menos 21 muertos y numerosos heridos, informaron medios locales.
Según la televisión Independent, muchos activistas del ala estudiantil del partido Jamaat-i-Islami, murieron por disparos de la policía. También falleció un líder de la Liga Awami, en el gobierno, en un ataque supuestamente a manos de los activistas de Jamaat. Según el funcionario policial Manjur Rahman, dos efectivos de las fuerzas de seguridad murieron linchados por los manifestantes.
Tras los incidentes, Jamaat-e-Islami convocó una huelga general de 48 horas y una protesta el domingo contra la acción policial.
Delawar Hossain Sayedee, de 73 años y vicepresidente del partido opositor Jamaat-i-Islami, fue condenado por un tribunal especial por su implicación en asesinatos, saqueos, violaciones, incendios intencionados y conversiones forzosas de hindúes al islam durante la guerra de independencia.
El juez ATM Fazle Kabir anunció el veredicto en su presencia y en medio de fuertes medidas de seguridad, debido a la huelga general convocada por el partido opositor, que exigía la puesta en libertad del acusado.
Al conocer la sentencia, los seguidores del partido islamista salieron a la calle para protestar en varias ciudades del país y se enfrentaron con la policía. Los manifestantes incendiaron un puente ferroviario que une la capital Daca con la ciudad portuaria de Chittagong, lo que obligó a cerrar ese trayecto al tráfico durante dos horas.
El tribunal ya condenó a muerte en ausencia al ex líder del partido Abdul Kalam Azad por su implicación en los mismos crímenes. A comienzos de febrero, el vicesecretario general del partido islamista, Abdul Quader Mollah, fue condenado a cadena perpetua.
Los manifestantes afines al gobierno llevan cuatro semanas en las calles pidiendo la pena de muerte para todos los criminales de guerra y la prohibición del partido. A ellos se enfrentan los manifestantes islamistas, que critican el proceso contra 13 supuestos criminales de guerra al considerarlo un juicio político. Grupos defensores de los derechos humanos expresaron también su preocupación sobre la justicia del proceso.
El actual Bangladesh era parte de Pakistán tras el fin de la colonia británica en 1947. En 1971 inició una guerra por su independencia con la ayuda de India. Según los historiadores perdieron la vida entre 300.000 y tres millones de personas./DPA