La jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, aseguró hoy que el Grupo 5+1 se tomará una pausa en las negociaciones nucleares con Irán tras concluir hoy la quinta ronda en la ciudad kazaja de Alma Atá.
"Ha quedado claro que las posturas de Irán y el 5+1 aún son distantes", dijo en rueda de prensa Ashton, quien precisó que las delegaciones mantendrán ahora consultas con sus respectivas capitales para decidir los próximos pasos.
Al mismo tiempo, la diplomática destacó que es la primera vez que ambas partes analizan en profundidad todos los aspectos del problema nuclear de Irán, país que insiste en que las grandes potencias reconozcan su derecho a enriquecer uranio.
"Nosotros, por supuesto, hacemos nuestro trabajo de forma que tengamos la seguridad sobre los fines pacíficos del programa nuclear (de Irán). Éstas no son sólo conversaciones, son negociaciones con un objetivo, obtener resultados", dijo.
Además, insistió en que Teherán dé una respuesta clara a la propuesta presentada en la anterior cuarta ronda de finales de febrero en Alma Atá con el fin de poner en práctica medidas de confianza entre ambas partes.
Ashton destacó que el objetivo de las sanciones impuestas a Irán es precisamente ejercer presión sobre la República Islámica para que el proceso avance y lograr una solución al problema nuclear.
Las grandes potencias habían llamado al término de la primera jornada a Teherán a mostrar una mayor voluntad política para disipar las dudas de la comunidad internacional sobre el programa nuclear iraní.
Irán aún no ha respondido ni a la propuesta de suspender el enriquecimiento de uranio al 20 por ciento ni a la de reducir la capacidad de la planta subterránea de procesamiento nuclear de Fordo.
A cambio, el G5+1 se ha mostrado dispuesto a suavizar algunas de las sanciones económicas impuestas al régimen de Teherán, como facilitar la transferencia de oro a Irán desde otros países.
El portavoz de la alta representante de la Unión Europea, Michael Mann, aseguró que el sexteto está dispuesto a reconocer el derecho de Irán a enriquecer uranio, pero que Teherán debe antes garantizar el carácter pacífico de su programa nuclear.
Según los expertos, la cercanía de las elecciones presidenciales iraníes de junio próximo ha impedido que Teherán adquiriera el compromiso de aceptar las propuestas de las grandes potencias.EFE