Los gobiernos de Alemania y Reino Unido pidieron a sus ciudadanos salir de la ciudad libia de Bengasi ante una amenaza concreta inminente de la que no dieron más detalles.
El Ministerio de Exteriores británico instó a sus nacionales a abandonar la ciudad citando una "amenaza inminente y específica" para ciudadanos occidentales.
Poco después, el Ministerio de Exteriores germano advirtió en su página web de un peligro "inminente y concreto", y llamó a los ciudadanos alemanes que saliesen de Bengasi y sus inmediaciones inmediatamente.
El pasado 11 de septiembre, el embajador estadounidenese murió en un ataque al consulado de este país en Bengasi.
La actual alerta de Berlín y Londres se produce una semana después de que 37 trabajadores extranjeros de ocho países murieran en un ataque a un yacimiento de gas en Argelia perpetrado por islamistas en protesta por la intervención francesa en la vecina Mali.
Según el gobierno británico, la intervención de Francia para frenar el avance islamista en Mali elevó la probabilidad de ataques contra ciudadanos occidentales en el norte de África.
Tras la alerta de Reino Unido, Air Malta canceló el vuelo que tenía previsto para el jueves a Bengasi, asegurando que se tomó la decisión como medida preventiva. El gobierno maltés también alertó a sus ciudadanos residentes en Bengasi, ante una situación que calificó de "preocupante".
Por su parte, y antes de la advertencia, el gobierno alemán ya había recomendado no viajar a Libia después de la intervención francesa en Mali. "La situación en todo el país sigue siendo compleja. Sigue habiendo enfrentamientos armados aislados y pueden ocurrir en cualquier momento", alertaba la recomendación previa. La actual alerta ante una amenaza y la petición de abandonar el país son muy inusuales.
El ministro de Economía alemán, Philipp Rösler, canceló el miércoles una gira prevista a Libia y Argelia ante la situación que vive el norte del continente./DPA
(KC)