AFP
Activistas medioambientales, indígenas y organizaciones ecologistas de todo el mundo marchan hoy en Lima para presionar por un acuerdo climático mundial que reduzca las emisiones de carbono de países desarrollados y permita contener a futuro el calentamiento global.
La llamada Marcha de los Pueblos, que surcará la capital peruana, se desarrollará en paralelo a la conferencia de las partes de la ONU sobre cambio climático (COP20), donde este miércoles varios presidentes de la región se sumarán a las deliberaciones.
La manifestación, que los organizadores esperan sea una de las mayores demostraciones ambientalistas recientes en América Latina, sigue a una marcha realizada en septiembre en Nueva York, que volvió a poner al cambio climático como un asunto prioritario de las agendas políticas internacionales.
"Estamos esperando entre 15.000 y 20.000 personas", dijo Bert Wander de la agrupación ambientalista Avaaz.
La demostración, que se extenderá por unos cinco kilómetros, cuenta con apoyo de sindicatos locales de trabajadores, comunidades campesinas, y activistas contra la pobreza, entre otros, comentó Wander.
Las comunidades indígenas que habitan en la región amazónica son los mejores conservadores del medio ambiente y una barrera contra la deforestación, según organizaciones indigenistas que reclaman titulación para sus tierras.
La Marcha de los Pueblos contaba además con el firme respaldo del presidente boliviano Evo Morales, que desistió de participar y regresó a Bolivia tras intervenir en la inauguración del segmento de alto nivel de la COP20.
"Nuestros pueblos están cansados de tanto engaño, de sufrir el incremento de la temperatura, los deshielos de nuestros nevados, lluvias que causan inundaciones crueles y sequías desoladas que cada vez nos hacen más pobres", dijo el martes Morales, primer presidente indígena de Bolivia.
Este miércoles la conferencia climática tendrá un segmento de presidentes con la participación del anfitrión peruano, Ollanta Humala, y sus pares de la Alianza del Pacífico, Juan Manuel Santos, de Colombia, Enrique Peña Nieto, de México y Michelle Bachelet, de Chile.
Los cuatro presidentes tienen previsto dar posteriormente una declaración conjunta donde sentarán la posición sobre el cambio climático de la Alianza de Pacífico, el nuevo acuerdo comercial que sellaron los cuatro países en 2013 y que busca impulsar su comercio con Asia.
El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, se aguarda en Lima en las próximas horas para unirse a la conferencia luego que su gobierno anunció poco antes de la cita de Lima un acuerdo con China par reducir las emisiones de carbono en los dos países y prometió 3.000 millones de dólares antes de 2020 en ayudas a los países vulnerables al cambio climático.
Los delegados de medio ambiente de los países participantes entran este miércoles en el segundo de cuatro días de deliberaciones para avanzar a un acuerdo que debe aprobarse en diciembre de 2015 en París, y que se convertirá en la herramienta clave para hacer frente al calentamiento de la tierra.
El nuevo pacto de cambio climático, que se prevé entraría en vigencia en 2020, debe asegurar a finales de siglo el calentamiento global no sea mayor a 2 grados celsius, medidos desde la era preindustrial.
Este es el nivel que los científicos han acordado es más seguro que estimaciones previas.
Con las actuales emisiones, la superficie terrestre se calentará 4 grados celsius más este siglo, con el consecuente impacto en sequías, tormentas extremas, inundaciones y crecida del nivel del mar.
Las negociaciones de este miércoles se centrarán en un asunto escabroso: de que manera las naciones cumplirán sus promesas de reducir las emisiones de carbono, causantes de los gases de efecto invernadero que producen el calentamiento global.
Las naciones desarrolladas que son grandes emisoras de carbono están bajo presión para poner sus promesas de reducción sobre la mesa hacia el primer trimestre de 2015, con tiempo para poder finalizar el acuerdo en Paris a finales de año.
Las negociaciones entraron el martes en una etapa decisiva con un llamado de urgencia del secretario general, Ban Ki-moon.
"Todavía hay una oportunidad de mantener en menos de 2ºC el aumento de la temperatura, pero la ventana de oportunidades puede cerrarse pronto", dijo Ban, quien impulsa las deliberaciones que concluyen el viernes en Lima.
"Traigo un mensaje de esperanza, pero también de urgencia. Tenemos que actuar ahora", insistió Ban ante la sesión plenaria.
2014-12-10