EFE
Una comisión formada por representantes de seis grandes potencias e Irán se reúne hoy en Viena para revisar la puesta en marcha del acuerdo nuclear con la República Islámica, en vigor desde hace justo un año.
Con ese acuerdo, conocido como Plan Integral de Acción Conjunta (Jcpoa), se redujo el sustancialmente el potencial y el alcance del programa nuclear de Irán a cambio de un levantamiento de las sanciones internacionales contra ese país.
Altos funcionarios de Estados Unidos, Rusia, China, Francia, Reino Unido y Alemania se reunieron hoy en un céntrico hotel de Viena con una delegación iraní para analizar si ambas partes están cumpliendo todo lo estipulado en el histórico acuerdo.
La reunión es coordinada por Helga Schmid, vicesecretaria del Servicio Exterior de la Unión Europea (UE).
En el centro del debate, que comenzó a las 12.30 hora local (10.30 GMT), se encuentra la reciente decisión del Congreso de Estados Unidos de prologar las sanciones estadounidenses contra Irán durante otros diez años.
Según Teherán, esta decisión contraviene el acuerdo nuclear, firmado en julio de 2015 en Viena y en vigor desde el 16 de enero de 2016, cuando el Organismo Internacional de Energía Atómica (Oiea) confirmó que Irán había cumplido todas las exigencias del pacto.
Éstas incluye reducir las reservas de uranio enriquecido a menos de 300 kilos en Irán, así como el desmantelamiento de miles de centrifugadoras de gas para la producción de ese material, que tiene un posible doble uso, civil y militar.
Además, entre otras muchas medidas, se congeló la construcción de un reactor de agua pesada, con potencial de producir plutonio, otra sustancia utilizada para fabricar bombas nucleares.
A cambio, se levantaron todas las sanciones internacionales, incluyendo el embargo petrolero de la Unión Europea contra Irán, y se restablecieron ciertos contactos comerciales entre las partes.
A pesar de relanzar su producción petrolera y firmar algunos importantes contratos comerciales con Rusia, China, la UE e incluso Estados Unidos, el acuerdo no trajo el "boom" económico, que había prometido el presidente de Irán, Hasán Rohaní, a sus ciudadanos.
En mayo próximo, el moderado Rohaní enfrenta elecciones presidenciales en las que buscará ser reelegido.
El presidente electo de Estados Unidos, el republicano Donald Trump, y los elementos más conservadores en Irán consideran que este acuerdo no sirve a sus intereses y han pedido su suspensión, aunque por el momento el JCPOA sigue adelante.