DPA
La compañía aérea de bandera Aerolíneas Argentinas redujo en un 44,1 por ciento su déficit entre 2012 y 2013, según anunció hoy su presidente, Mariano Recalde, quien precisó que las pérdidas sumaron el año pasado unos 247,1 millones de dólares.
"En 2013 superamos las metas que nos habíamos propuesto al comienzo del año y logramos además reducir más de lo que estaba previsto la ayuda del Estado Nacional a la compañía", señaló Recalde.
El presidente de la compañía, que fue expropiada al grupo español Marsans en 2009, informó en tanto que el número de pasajeros en 2013 creció un 19,1 por ciento respecto al año anterior, con un total de 8.340.003 personas transportadas.
Las frecuencias "aumentaron un 16,3 por ciento, 5.960 más que en 2012, en tanto que las ventas crecieron en un 21,7 por ciento respecto al ejercicio anterior, lo que implica que se vendieron 342,10 millones de dólares más durante 2013″, precisó Recalde en una conferencia de prensa. Las ventas alcanzaron 1.918 millones de dólares.
El ejecutivo enumeró que entre las metas fijadas para 2014 está alcanzar los diez millones de pasajeros. "Y para eso necesitamos incorporar más aviones, sumar más frecuencias y brindar un servicio que nos permita llenar los aviones", destacó.
"Hacia esos objetivos, basados en la conectividad que nos hemos impuesto como meta sustancial, estamos trabajando desde el primer día de este año; en diciembre hemos incorporado nuevos aviones tanto para la flota de cabotaje como para la internacional que ya se encuentran operativos", informó.
En marzo, Aerolíneas volverá a volar a la ciudad de Paraná, en Entre Ríos, por lo que después de 25 años volverá a conectar a todas las provincias argentinas. También agregará como nuevo destino la ciudad brasileña de Curitiba y reforzará los vuelos a ese país durante junio, cuando se celebre el Mundial de fútbol.
En cambio, explicó por qué se decidió dejar de operar la ruta a Sidney, Australia, al considerar que "no era rentable desde el punto de vista económico, pero tampoco redituable desde el punto de vista del servicio para los argentinos, ya que eran muy pocos los que viajaban hacia y desde Australia a nuestro país".