Al menos trece personas murieron hoy y otras 57 resultaron heridas por el estallido de varios coches bomba y artefactos explosivos en Bagdad y en Ramadi, en el oeste del país, informó a Efe una fuente policial.
Cuatro personas fallecieron y otras doce sufrieron heridas por la explosión de un coche bomba en el barrio de Benuk, en el este de la capital iraquí.
En el norte de Bagdad, un suicida que conducía un vehículo cargado con explosivos los hizo detonar al paso de una patrulla del ejército iraquí y mató a dos soldados y dos civiles, al tiempo que hirió a otras doce personas.
Además, otras tres personas perecieron y dieciocho resultaron heridas por el estallido de otros dos coches bomba cerca de un centro comercial en el sur de la capital y en el céntrico barrio de Al Karrada.
La fuente agregó que al menos diez personas resultaron heridas por la explosión de dos artefactos en los barrios de Baladiyat, en el este de Bagdad, y Saidia, en el suroeste.
En la ciudad de Ramadi, capital de la provincia occidental de Al Anbar, un grupo armado disparó contra un vehículo en el que viajaban guardias fronterizos y causó la muerte de dos agentes.
En otro ataque, un coche bomba explotó en las proximidades de un complejo de edificios gubernamentales en Ramadi y ocasionó heridas a dos guardaespaldas del gobernador de Al Anbar, Qasem al Fahdawy, y a otras tres personas.
Ayer miércoles, al menos veinte personas murieron y sesenta resultaron heridas por la explosión de vehículos cargados con explosivos en dos áreas de mayoría suní de Bagdad, uno de ellos contra los asistentes a una boda.
El pasado abril se convirtió en el mes más sangriento en Irak en casi cinco años, con 712 fallecidos, en medio de un alarmante rebrote de los ataques. La violencia ha continuado en mayo, con numerosos atentados y ataques armados. EFE