Un hombre hizo estallar el sábado un coche bomba a la entrada de un edificio del Ministerio del Interior en el centro de Bagdad, matando al menos a 11 personas, informaron funcionarios iraquíes, un día después de un ataque contra una mezquita suní en una provincia volátil donde murieron más de 60 personas, elevando las tensiones sectarias.
Un policía dijo que el atacante condujo el auto hasta la puerta de la sede de los servicios de inteligencia en el distrito de Karrada, matando a seis civiles y cinco agentes de seguridad. Agregó que otras 24 personas resultaron heridas.
Un funcionario médico confirmó las cifras de víctimas. Ambos funcionarios hablaron bajo la condición de no ser identificados porque no estaban autorizados a informar a los medios de comunicación.
Desde principios de año, Irak vive una creciente insurgencia suní, con el grupo extremista Estado Islámico y milicianos suníes aliados que se han apoderado de zonas del oeste y norte del país.
La crisis empeoró desde junio, cuando el grupo declaró un gobierno islámico, o califato, en el territorio bajo su control./AP