Tras el devastador terremoto que afectó la provincia de Sichuan, en el sudoeste de China, la cifra de muertos subió a 193, informó hoy martes la agencia de noticias estatal Xinhua.
Además, sufrieron heridas unas 11.000 personas, de las cuales unas 1.000 están en estado grave, añadió la agencia. El lunes, las fuerzas de rescate pudieron sacar a 320 personas con vida de entre los escombros.
Más de 22.000 soldados y unidades paramilitares fueron enviados a la región. El Ejército de Liberación Popular lanzó productos básicos, como agua y comida, desde helicópteros.
El sismo de magnitud 7,0 en la escala de Richter ocurrió el sábado poco después de las 08:00 horas. Hasta hoy se registraron más de 3.200 réplicas, cuatro de ellas de una magintud de 5,0 o superior.
Las condiciones meteorológicas están dificultando los trabajos de rescate. El martes llovió en la zona más afectada y se prevé que siga haciéndolo en los próximos días, así que se teme que las precipitacioens puedan provocar nuevos desprendimientos de tierra.
En algunos pueblos siguen escaseando la comida, las medicinas y las tiendas de campaña. "Estamos muy descontentos con el gobierno. No hay ayuda para gente como nosotros, que vive en lugares apartados", se quejó un vecino del pueblo de Taiping al diario "South China Morning Post". /DPA