DPA
Los colombianos acudirán a las urnas para elegir a su presidente para el periodo 2014-2018 en una campaña llena de escándalos y acusaciones de "guerra sucia" entre quienes obtendrían la mayor cantidad de votos, el presidente Juan Manuel Santos y el opositor Óscar Iván Zuluaga, según las encuestas.
Varios analistas políticos coinciden en que la campaña ha sido la más polémica de los últimos tiempos por la falta de debates y las denuncias entre los candidatos, que llegaron a los estrados judiciales.
Santos, que ganó las elecciones de 2010 y ha gobernado con el apoyo de la coalición de centro-derecha Unidad Nacional, dice que busca la reelección para terminar tareas inconclusas, principalmente el proceso de paz que inició en 2012 con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
En ese propósito cuenta con el pleno apoyo del gobernante Partido Social de Unidad Nacional y de sus aliados, el Partido Liberal, Cambio Radical y un sector del Partido Conservador.
Zuluaga representa al partido de derecha radical Centro Democrático, cuyo máximo líder es el ex presidente Álvaro Uribe (2002-2010), jefe de la oposición y antiguo aliado de Santos.
En los comicios también participan Enrique Peñalosa, de la independiente Alianza Verde; Clara López, de la alianza izquierdista entre el Polo Democrático Alternativo y la Unión Patriótica; y Marta Lucía Ramírez, del Partido Conservador.
Las encuestas de comienzos de este año mostraban una marcada tendencia a favor de Santos, aunque no lo suficiente para ser reelegido en la primera vuelta del 25 de mayo. Sin embargo, los últimos sondeos que se conocieron hasta la semana pasada reflejaron un notable ascenso de Zuluaga, al punto de registrarse un empate técnico entre ambos.
Todas las encuestas coincidieron en que ninguno de los candidatos obtendrá la mitad más uno de los votos, lo que obligaría a efectuar el 15 de junio una segunda vuelta entre los dos con mayor respaldo.
Las normas electorales prohíben la divulgación de encuestas en la semana anterior a los comicios, por lo que se desconoce hasta qué punto ha cambiado la intención de voto en medio de los escándalos que han sacudido a las campañas de Santos y Zuluaga.
La polémica se instaló a comienzos de este mes, cuando fue arrestado el ingeniero de sistemas Andrés Sepúlveda, acusado de interceptar cuentas de correo electrónico vinculadas a las negociaciones que llevan a cabo en Cuba el gobierno y las FARC.
El escándalo dio un giro al establecerse que Sepúlveda trabajaba en el equipo de redes sociales de la campaña de Zuluaga, cuyo jefe político, el ex presidente Uribe, se opone al proceso de paz.
Zuluaga aseguró que no conocía a Sepúlveda, pero la controversia creció cuando se reveló un video en el que el candidato aparece en la oficina del "hacker" y se habla de informaciones de inteligencia que solamente podían estar en manos de organismos estatales de seguridad.
Según un "hacker" español que trabajó para Sepúlveda, la estrategia de su ex jefe era hacer ver a los negociadores de las FARC que estaban siendo espiados para que éstos responsabilizaran al gobierno y rompieran las conversaciones. Zuluaga dice que todo eso es "un montaje".
Pocas horas después de la captura del "hacker", Uribe denunció ante la prensa que dos millones de dólares de narcotraficantes ingresaron a la campaña que en 2010 llevó a Santos a la presidencia, que él apoyo con entusiasmo cuando era jefe de Estado.
Mientras que Zuluaga ya fue denunciado ante la Justicia por el presunto espionaje, Uribe se ha negado a presentar una denuncia formal contra Santos, aunque asegura que tiene información sobre el supuesto ingreso de dinero del narcotráfico en su anterior campaña.
Santos ganó las elecciones con el respaldo de Uribe, de quien era considerado su "delfín" hace cuatro años, pero apenas empezó a gobernar se distanció de su antiguo jefe político por diversos factores, entre ellos la decisión de dialogar con las FARC para terminar con cinco décadas de conflicto.
Uribe, que defiende la vía militar para acabar con la guerrilla, no solo respaldó a Zuluaga en la actual campaña, sino que se puede afirmar que tuvo más protagonismo que su candidato, quien en medio del escándalo decidió guardar silencio ante la prensa.
2014-05-24