El magnate Bidzina Ivanishvili, líder fundador de la coalición Sueño Georgiano, que en las legislativas del octubre del año pasado desbancó del poder a la formación del ahora expresidente Mijaíl Saakashvili, abandonó hoy la actividad política para retornar al sector privado.
Ivanishvili, el hombre más rico de Georgia, con un fortuna estimada en 5.300 millones de dólares o 3.910 millones de euros, dejó hoy su cargo de presidente del partido Sueño Georgiano, núcleo de la coalición del mismo nombre.
Al frente de la formación, a propuesta de Ivanishvili, fue elegido unanimidad el primer ministro Irakli Garibashvili, quien también sucedió al magnate en la jefatura de Gobierno, cargo que éste último desempeñó durante un año.
"Dejo el partido en buenas manos. Cumplí mi promesa de liberar al país del antiguo régimen. Abandono la política, pero seguiré siendo un ciudadano activo", dijo el multimillonario en el congreso de Sueño Georgiano celebrado hoy en Tiflis con la participación de 1.300 delegados.
Ivanishvili destacó que en un año se derrumbó el "mito de que Europa daría la espalda a Georgia y de que se enterraría la democracia si el Movimiento Nacional Unido (la formación de Saakashvili) era apartado del poder".
"Ya todos en Georgia y en Occidente han comprendido que durante los nueve años de gestión de los ‘nacionales’ la democracia fue aparente", agregó.
El magnate indicó que las elecciones presidenciales de 27 de octubre pasado, que ganó el candidato de Sueño Georgiano, Gueorgui Margvelashvili, fueron la puntilla de un "régimen basado en el autoritarismo, la mentira y la violencia".
El jefe del Estado, presente en el congreso, declaró a la prensa que la renuncia de Ivanishvili es un "hecho sin precedentes, una lección para todos los políticos georgianos". EFE