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Nacido bajo el nombre de Karol Józef Wojtyła un 18 de mayo de 1920 en Polonia, mejor conocido como Juan Pablo II, fue el papa 264 de la Iglesia católica y el primer papa polaco de la historia, su pontificado de casi 27 años fue el tercero más largo de la historia.
Juan Pablo II es considerado uno de los líderes más influyentes del siglo XX, es recordado por ser uno de los principales símbolos del anticomunismo. Fue muy importante para poner fin al comunismo en Polonia y en toda Europa, así como para mejorar de manera significativa las relaciones de la Iglesia católica, el judaísmo, el islam, la Iglesia Ortodoxa Oriental y la Comunión anglicana.
En 1981 el papa Juan Pablo II sufrió un intento de asesinato mientras saludaba a los fieles en la plaza de San Pedro, por parte de Mehmet Ali Agca, quien le disparó entre la multitud. Posteriormente fue perdonado públicamente por el pontífice en personas.
Fue uno de los líderes mundiales más viajeros de la historia, visitó 129 países durante su pontificado. Hablaba los siguientes más de 10 idiomas.
Juan Pablo II sufría de Parkinson enfermedad que lo debilitó hasta la indefensión, limitando su capacidad de habla. Joseph Ratzinger, su sucesor más tarde y conocido como el Papa Benedicto, señaló que en los últimos años del pontificado de Juan Pablo II, el sufrimiento que padeció fue casi una forma de gobierno: “Sí, se puede gobernar también con el sufrimiento. Sin duda, es algo extraordinario. Pero después de un largo pontificado y después de tanta vida activa del Papa, era significativo y elocuente un tiempo de sufrimiento, que devino casi en una forma de gobierno.
El deterioro físico de Juan Pablo II se incrementó hasta su fallecimiento en 2005. En aquel año tuvo que ser hospitalizado por un síndrome de dificultad respiratoria. Se le realizó una traqueotomía a mediados de marzo. Hacia finales del mismo mes su estado se agravó y entre el 31 de marzo y el 1 de abril sufrió una septicemia por complicación de una infección de vías urinarias.
Falleció el 2 de abril de 2005, las últimas palabras del pontifice fueron en polaco: "Pozwólcie mi iść do domu Ojca" (Déjenme ir a la casa de mi Padre). Al fallecer tenía 84 años y en su agonía, le dictó a su secretario, Stanisław Dziwisz, una carta en la que decía:
"Soy feliz, séanlo también ustedes. No quiero lágrimas. Recemos juntos con satisfacción. En la Virgen confío todo felizmente".
2018-04-02