Un tribunal francés ordenó hoy a la aerolínea de bajo coste Ryanair el pago de 8 millones de euros (10,1 millones de dólares) en concepto de daños y multa por violaciones a las leyes laborales francesas, por no declarar a personal local contratado.
El tribunal de Aix-en-Provence, en el sur de Francia, consideró que Ryanair no pagó prestaciones sociales en Francia por 127 miembros de su personal basados en Marsella entre 2007 y 2011, año en que cerró su base permanente en la ciudad francesa.
El caso fue abierto a instancias de la seguridad social francesa (Ursaaf), la oficina de empleo (Pole Emploi), el fondo estatal de pensiones y sindicatos representantes de miembros de cabina y pilotos.
Ryanair alegó que la tripulación trabajaba para una aerolínea registrada en Irlanda, por lo que consideraban que trabajaban principalmente en Irlanda y no en Francia. Y dijo que como ya pagó por ellos contribuciones a la seguridad social y pensiones en Irlanda, no lo pagará de nuevo en Francia.
Ryanair señaló que una ley de 2006 que exige a las aerolíneas francesas con base en Francia que cumplan las leyes laborales francesas pretende solamente impulsar a una "Air France en pérdidas" y consideró que la cuestión sólo puede resolverse en tribunales europeos.
"Si a Ryanair se le obliga a pagar esas tasas sociales y contribuciones a las pensiones en Francia, entonces reclamaría la mayoría de ellas al gobierno irlandés", dijo la aerolínea en un comunicado. /dpa