El jefe negociador del Gobierno colombiano en las conversaciones de paz con las FARC, Humberto de la Calle, justificó este domingo la anulación de la petición de extradición desde Venezuela del guerrillero alias "Julián Conrado" y afirmó que en su traslado a Cuba "mediaron consideraciones humanitarias".
De la Calle se refirió a este polémico asunto, conocido la pasada semana, en una declaración previa al viaje del equipo negociador del Gobierno a La Habana para iniciar mañana la primera ronda de conversaciones de 2014.
"En el caso de alias ‘Julián Conrado’ mediaron consideraciones humanitarias", dijo, aunque advirtió de que "la situación jurídica de los miembros de la delegación de las FARC será objeto de examen posterior a la luz de los criterios sobre justicia transicional".
El Gobierno anunció el pasado jueves que renunciaba a reclamar en extradición al guerrillero Guillermo Enrique Torres Cueter, conocido como "Julián Conrado" o "el cantante de las FARC", y que una vez excarcelado en Venezuela viajaría a La Habana para integrarse en la delegación de negociadores de la guerrilla.
No obstante, la Delegación de Paz de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) declaró después que debido a su "precario estado de salud", "Julián Conrado" sería atendido por médicos cubanos y "estará al margen de actividades relacionadas con las conversaciones de paz".
En su declaración de este domingo, De la Calle señaló: "En relación con hechos recientes acabo de hablar con el presidente (Juan Manuel Santos) y recibir sus instrucciones. Las FARC pueden proponer y llevar a cabo cambios en su delegación. El mismo Gobierno ha llevado nuevas personas a La Habana".
Por este motivo, opinó que la mesa de negociaciones "se rige por el respeto a la contraparte y a las reglas del juego".
El traslado de "Julián Conrado" fue cuestionado esta semana por opositores al proceso de paz como el expresidente Álvaro Uribe, quien argumentó que se trataba de una primera expresión de "impunidad".
El 31 de mayo de 2011 Conrado fue detenido en el estado venezolano de Barinas y, desde entonces, estuvo recluido una cárcel de Caracas.
En Colombia, ha sido acusado de los delitos de desaparición forzada, reclutamiento de personas, secuestro con fines de extorsión agravado y tortura.
El diálogo de paz entre las FARC y el Gobierno de Santos comenzó en noviembre de 2012 y tiene como sede permanente La Habana.
Tras un receso de fin de año, las partes retomarán mañana las conversaciones, centradas en el tema de cultivos ilícitos y narcotráfico, tercer punto de la agenda.
Domingo 12/01/2014