El Gobierno de Colombia y las FARC afirmaron que "continúan avanzando" en el debate sobre la participación política de la guerrilla en un eventual escenario de paz, aunque no han llegado a resultados concretos sobre ese punto al concluir otra ronda de negociación en La Habana.
Los negociadores del presidente Juan Manuel Santos y de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) cerraron el undécimo ciclo de sus diálogos para intentar la paz, unas conversaciones que retomarán el próximo día 22.
Según un comunicado suscrito por ambas partes, en esta última etapa que comenzó el 1 de julio se avanzó en la discusión sobre el segundo punto de la agenda pactada para el proceso y en concreto sobre "las garantías para el ejercicio de la oposición como un elemento esencial para la construcción de un acuerdo final" que cimente las bases de la paz.
"Hemos tenido una muy rica discusión", indicó a los medios Iván Marquez, número dos de las FARC y jefe de su equipo negociador quien no concretó mayores detalles sobre los debates de la mesa de negociación.
En este ciclo, el Gobierno de Santos y la principal guerrilla colombiana intercambiaron propuestas sobre los derechos y garantías políticas para los movimientos que surjan tras un acuerdo definitivo de paz y sobre el acceso a los medios de comunicación.
Las partes también escucharon en este ciclo a dos expertos (cuyos nombres no precisaron) e invitaron a la ciudadanía colombiana a seguir participando en el proceso de diálogo a través de los mecanismos creados al efecto.
A lo largo de estos días, las FARC continuaron desgranando ante los medios sus propuestas sobre la agenda política, donde su demanda más importante la convocatoria de una Asamblea Constituyente que el Gobierno de Santos rechaza tajantemente.
Los guerrilleros insistieron sobre este punto al reivindicar que "la Constituyente es la llave de la paz".
"La retórica del poder contra la Constituyente debe ceder paso a planteamientos argumentativos que entreguen razones y no descalificaciones exclamativas. No se trata de que nos hagan afirmaciones de autoridad", reclamaron las FARC en una declaración.
Advirtieron además a los "adoradores de la Corte Penal Internacional" que las normas internacionales no están por encima de una constituyente, puesto que Colombia "no ha regalado su autodeterminación ni su soberanía que reside en el pueblo".
La guerrilla también se refirió a las víctimas del conflicto para insistir en que las FARC sienten "profundamente su dolor" y en que no podrá haber fin del conflicto sin haber resuelto "a satisfacción de todos" este punto, dijo Iván Márquez quien reiteró que el estado colombiano es "la última instancia de imputación".
El grupo insurgente volvió a plantear que un grupo de juristas nacionales e internacionales estudie "los alcances de la responsabilidad del Estado por lo acontecido durante las últimas décadas de conflicto interno".
En las dos últimas semanas, los diálogos de paz de La Habana han tenido como telón de fondo las tensiones en el Catatumbo, convulsa y cocalera región colombiana en la frontera con Venezuela que desde hace un mes es escenario de protestas campesinas en rechazo a una campaña oficial de erradicación de hoja de coca.
Las FARC han mostrado su solidaridad con los campesinos que protagonizan estas reivindicaciones, mientras que el Gobierno de Santos, por boca de su ministro de Interior, Fernando Carrillo, ha acusado a la guerrilla de tratar de incidir en el proceso de paz con la protesta en esa región.
Esta mañana, el insurgente Marco León Calarcá, alias de Luis Alberto Albán, se preguntó si Carrillo es la persona idónea para solucionar el conflicto del Catatumbo "cuando ya a priori tiene una decisión y dice que ésos no son campesinos sino guerrilleros farianos"./EFE
Martes 09/07/2013