Zoilamérica Ortega Murillo, hija adoptiva del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, acusó hoy al gobierno de su padre de "asfixiar" a las organizaciones no gubernamentales y de "presionar y amenazar" a los países donantes que cooperan con éstas.
Ortega Murillo, directora del Centro de Estudios Internacionales (CEI), solicitó este lunes un trámite de mediación judicial para que la embajada de Noruega en Managua le pague a su ONG unos 68.000 dólares que según afirma le han retenido por presiones del gobierno.
"Existe un hostigamiento y persecución política del gobierno contra nuestra organización, no entendemos cuál es el daño que le hacemos al país", dijo la socióloga, que llegó a la instancia judicial con su abogado, el ex procurador de Justicia Alberto Novoa.
Zoilamérica, hija adoptiva del presidente Ortega, y biológica de la primera dama, Rosario Murillo, estremeció a Nicaragua en 1999 al denunciar públicamente a su padrastro, entonces líder opositor, de haber cometido abuso y violación sexual en su contra.
Daniel Ortega evadió un juicio amparándose en su inmunidad como diputado, y el escándalo terminó meses después, tras un presunto arreglo con la joven.
Sin embargo, Ortega Murillo volvió a la carga hace varias semanas, al denunciar que el vicecanciller encargado de la cooperación externa, Valdrac Jaenstchke, había "presionado" a la embajada de Noruega para que retiren su financiamiento al CEI, un organismo que ejecuta proyectos de diversidad sexual.
"No quería volver a los tribunales (de justicia) … (pero) el gobierno de Nicaragua me obliga a defender mi organización de deudas impagables", dijo a fines del mes pasado a la prensa.
"Hay una persecución política contra nosotros, hemos sido asfixiados económicamente", agregó este lunes al señalar que "son muchas las ONGs cuyos funcionarios reciben presiones y amenazas, al igual que los donantes que cooperan con ellos".
Ortega Murillo dijo que con el trámite de mediación espera que el gobierno de Noruega cancele el adeudo pendiente de 68.000 dólares, a fin de poder saldar deudas de las oficinas que el CEI tiene en el interior del país y en los cinco países de Centroamérica. /DPA