El presidente afgano, Hamid Karzai, pidió al nuevo gobierno de Pakistán que apoye de forma activa las conversaciones de paz con los extremistas talibanes, en una conferencia de prensa conjunta en Islamabad con el primer ministro paquistaní, Nawaz Sharif.
Pakistán debería ofrecer "una posibilidad o una plataforma", señaló Karzai. Si eso se ubica en lo más alto de la orden del día, ambos países pueden alcanzar estabilidad y paz, añadió.
El viaje es el primero de Karzai a Pakistán desde la llegada al poder de Sharif en junio. Karzai quiere que Islamabad use su influencia sobre los talibanes para convencerlos de que haya conversaciones directas con el gobierno de Kabul. Los insurgentes lo rechazan hasta ahora porque consideran a Karzai una marioneta de Estados Unidos.
Sharif respondió que su país apoyará los esfuerzos de paz y reconciliación en Afganistán, que deberían ser inclusivos y protagonizados por los propios afganos. "Le garantizo al presidente Karzai que Pakistán continuará dando todas las facilidades posibles a los esfuerzos de la comunidad internacional para la realización de este noble objetivo", aseguró.
Hoy hubo al menos seis muertos en un ataque de los talibanes en el este de Afganistán contra un almacén militar. Un atacante se voló por los aires y otros cuatro fueron abatidos por los soldados, informaron las autoridades. También murió un militar afgano en el enfrentamiento, que duró dos horas.
El apoyo de Pakistán es una de las principales condiciones para el éxito de la paz en Afganistán. Hace poco, Karzai señaló que cree que existe una conspiración internacional para dividir su país. Según esta teoría, Pakistán estaría planeando dar parte del territorio afgano a los talibanes. Kabul acusa a Islamabad con regularidad de dar ayuda militar y de inteligencia en secreto a los islamistas.
Los dos líderes hablarán en Islamabad sobre el posible traslado de la oficina de enlace que los talibanes abrieron en Doha, Qatar, a Arabia Saudí o Turquía. Karzai criticó duramente la presencia de los talibanes en Qatar, que al principio habían colgado un cartel en el edificio que decía "Emirato Islámico de Afganistán", junto con la bandera talibán.
Islamabad y Kabul coinciden en que la oficina debería mudarse a otro país, según una fuente del gobierno paquistaní. Además, Pakistán está dispuesto a liberar a más talibanes presos. "Puede haber avances, pero no se deben esperar declaraciones rápidas. Estas cosas necesitan tiempo", dijo una fuente del Ministerio del Exterior en Islamabad.
Ambas partes hablaron asimismo de la cooperación económica y los planes de Pakistán de construir nuevas carreteras y redes ferroviarias que lo conecten con Afganistán./EFE