Las familias de las dos jóvenes ecuatorianas fallecidas el pasado domingo en el embalse de Valmayor, situado en la zona norte de la Comunidad de Madrid (Centro), piden a las autoridades de su país que les costeen los billetes para que puedan regresar a Ecuador junto con los cuerpos de las menores.
El Consulado de Ecuador ya se había comprometido a sufragar los gastos de repatriación de las dos menores, de 13 y 14 años, que se ahogaron el 18 de agosto en el pantano de Valmayor.
Fuentes del Ayuntamiento de Galapagar, donde residía la menor de 13 años con su familia, explicaron entonces a Efe que el Consulado ecuatoriano también pondría a disposición de las familias cuatro billetes de avión.
Sin embargo, los padres de las fallecidas aseguraron este jueves en declaraciones a Efe que los billetes "no están garantizados", puesto que, según cuentan los familiares, desde la Embajada les indicaron que hasta este viernes 23 de agosto no tendrían una respuesta.
"No sabemos si la respuesta será favorable o negativa", dijo Segundo Moisés Escobar, padre de Joseline, una de las adolescentes ahogadas.
Segundo Escobar y Rosalino Mina, padre de la otra joven fallecida, son hermanos por parte de madre. Ambos expresaron que si solicitan al Gobierno ecuatoriano que les cubra los gastos de un viaje a Ecuador es por la situación de desempleo en la que se encuentran en España, con la consiguiente falta de recursos económicos.
"Solo trabajan nuestras mujeres y no nos alcanza con eso", explicó Segundo Escobar, quien también indicó que en la actualidad enfrenta una orden de desahucio.
Por su parte, su esposa, Saida Chalá, elevó su petición de ayuda hasta el Presidente de Ecuador, Rafael Correa. "Le pedimos que nos ayude. Este es el grito de una madre desesperada, porque estoy desesperada por poder enterrar a mi hija", dijo.
En entrevista con Efe, las familias también quisieron llamar la atención sobre otro dato que, en su opinión, podría haber sido tergiversado: la distancia de la orilla a la que se encontraban las pequeñas en el momento de ahogarse.
Fuentes de Emergencias Comunidad de Madrid 112 apuntaron que los cuerpos de las menores habían sido localizados, ya sin vida, a diez metros de distancia de la orilla del embalse y a ocho de profundidad.
Según aseguran las familias, las jóvenes, que no sabían nadar, no se adentraron en el pantano "más de un metro" desde la orilla. "El agua les llegaba apenas por los tobillos, y de repente el fondo cedió y cayeron en un precipicio", relató Segundo Escobar, en referencia a la zona profunda en la que se habrían ahogado Diana y Joseline.
En general, el baño está prohibido en todos los embalses de la Comunidad de Madrid, salvo en una zona acotada para esta actividad en el de San Juan.
De acuerdo con el testimonio ofrecido por los padres de las víctimas, el grupo no se encontraba en el lugar de los hechos bañándose, sino aprovechando la licencia de pesca de varios miembros de la familia para pasar el día pescando.
Por eso, denuncian que la desgracia podría haberse evitado si, además de la señalización existente que prohíbe el baño en la zona, se alertara de los riesgos que el lugar entraña para los pescadores. "Tenemos testigos presenciales de lo que ocurrió", añaden.
Mientras llega el momento de repatriar los cuerpos a Ecuador, y a la espera de saber si las autoridades del país les concederán billetes de avión, las familias han habilitado una cuenta para intentar recaudar fondos con los que poder viajar y enterrar a sus hijas. /EFE