Las lluvias que han afectado a Nicaragua en los últimos dos meses han dejado 15 muertos, más de 12.000 afectados y casi 2.300 viviendas dañadas en 14 de las 16 provincias del país, según un recuento oficial divulgado hoy.
El informe, emitido por el estatal Sistema de Atención y Prevención de Desastres (Sinapred), indicó que 1.670 personas fueron evacuadas de sus casas a causa de las lluvias, y se encuentran refugiadas en 13 albergues provisionales en zonas rurales y semi-urbanas.
Al dar a conocer el reporte oficial, la primera dama Rosario Murillo dijo que un total de 12.052 personas (2.500 familias) se han visto perjudicadas por la temporada lluviosa que inició el pasado 26 de mayo.
Murillo indicó que las precipitaciones provocaron el desborde de ríos e inundaciones que dañaron al menos 2.293 viviendas en 149 localidades de 47 municipios situados en 14 provincias del país.
Las lluvias más recientes afectaron severamente cuatro amplias zonas del litoral caribeño, donde el fin de semana las autoridades decretaron alerta amarilla debido a la crecida de ríos caudalosos.
Al menos 185 familias (más de 600 personas) tuvieron que ser evacuadas a refugios temporales en El Rama, Kukra Hill y la ciudad surcaribeña de Bluefields, donde los afectados solicitaron el envío de agua y alimentos.
El estado de alerta amarilla en Nicaragua significa que hay una situación de desastre inminente, y que las instituciones deben realizar evacuaciones en los sitios de mayor riesgo.
Esta es la segunda alerta de importancia en una escala de tres: el alerta verde se declara ante la amenaza de un fenómeno natural o provocado, y el alerta roja cuando el fenómeno surge de forma súbita y obliga a desarrollar acciones inmediatas de búsqueda, salvamento y rescate, atención médica y otras medidas de emergencia. /DPA