El pastor Fred Phelps, conocido por las proclamas homófobas que pronunciaba interrumpiendo entierros de soldados, en los que culpaba a la tolerancia con los homosexuales de los males de Estados Unidos, falleció este miércoles a los 84 años.
Así lo confirmó hoy su hija al diario Topeka Capital-Journal, aunque no aclaró las causas de la muerte de este predicador que fue muy criticado en algunos países por la agresividad de la campaña contra los homosexuales que inició en la década de 1990.
Phelps, que encabezaba la Iglesia Bautista Westboro, de Topeka (Kansas), se hizo famoso al proclamar que los atentados terroristas de septiembre de 2001, el huracán "Katrina" o las muertes de soldados en las guerras eran castigos de Dios a Estados Unidos por la tolerancia hacia los homosexuales y otros "pecados".
Los feligreses de su parroquia adquirieron la costumbre de presentarse en los funerales de militares con carteles en los que se leía "Dios te odia", "Vas al infierno", "Gracias a Dios por los soldados muertos" y "Dios odia a los maricones".
Los familiares de algunos de los soldados enterrados en las decenas de ceremonias que interrumpió denunciaron a Phelps por esta conducta, que le valió una multa de 11 millones de dólares impuesta por un tribunal federal.
Sin embargo, el Tribunal Supremo le levantó después la sanción al entender que estaba amparado por su derecho a la libertad de expresión.
El Gobierno británico también le prohibió la entrada en el Reino Unido en 2009 cuando se disponía a boicotear la actuación de un grupo teatral gay en este país.
Las minorías eran el objetivo preferido de sus furibundos ataques, de los que tampoco escapaban famosos, políticos ni líderes religioso.
Phelps, asimismo, rechazaba radicalmente cualquier mensaje que sonara a tolerancia.
"No vas a ninguna parte con ese lema de ‘Dios te ama'", declaró el predicador en una ocasión, y añadió: "Eso es una mentira diabólica del infierno sin autorización bíblica". EFE