La negociación entre el Gobierno colombiano y las FARC "es lo más importante" que está pasando ahora en América Latina, afirmó el presidente de Uruguay, José Mujica, en una entrevista con Efe.
Los esfuerzos para terminar con 50 años de guerra "merecen todo el apoyo de la sociedad mundial". Los conflictos armados ya no solucionan nada", enfatizó el exguerrillero tumamaro, de 78 años, de los que pasó catorce en prisión durante la dictadura en su país (1973-1985).
Mujica, que realiza una gira internacional que incluye China, España e Italia, para reforzar vínculos bilaterales y atraer inversiones, analizó en la entrevista la situación regional y nacional, la crisis europea, y comentó su visión de la vida y de la política.
P.- ¿Qué reflexiones hace sobre el despunte económico en América Latina, en contraste con la profunda crisis en la Unión Europea?
R.- América Latina está viviendo una edad floreciente. En términos económicos aprendimos que no se puede vivir con un déficit fiscal, que es necesario cuidar los recursos públicos y administrarlos mejor, y la conjunción positiva de política y economía ha ayudado a mitigar el grado de injusticia enorme en la región. Uruguay, históricamente fue el que distribuyó mejor.
La construcción de Unasur también ha dado una respuesta positiva en algunos momentos difíciles a las sociedades. Existen distintas opciones políticas, algunas más progresistas, otras menos, pero podemos acordar cosas en común con gobiernos muy diferentes.
La crisis europea, ya demasiado larga, nos esta golpeando parcialmente, en este mundo globalizado.
Europa vive una crisis de carácter político, en el sentido de que no encuentra el rumbo del conjunto de decisiones que le permitan salir de ese estancamiento.
¿Qué rumbo? Pedimos a Europa y al Gobierno español que defienda una perspectiva que permita concluir la negociación que dura ya muchos años entre Mercosur y la Unión Europea.
De lo contrario, hay que recordar que el principal cliente (del bloque regional) es la República Popular China (en materias primas), y en esa interdependencia, (Europa) tiene que ser inteligente.
P.- Sus iniciativas para legalizar el aborto y la venta y consumo de marihuana chocan con una importante oposición en su país según recientes sondeos, al tiempo que por ellas una ONG holandesa le propone al Premio Nobel de la Paz 2013.
R.- Las encuestas son favorables a la legalización del aborto, pero sí hay una negativa mayoritaria de la población sobre la marihuana.
Pretendemos regular un mercado que ya existe y prohibirlo es dejarlo al mundo clandestino. El verdadero problema no es la marihuana sino el narcotráfico, porque el consumo existe en nuestra sociedad.
Si al narcotráfico no le arrebatamos el mercado, inducimos a la multiplicación del mundo delictivo y el narco termina prostituyendo las sociedades y arrasando con todos los valores.
Plata o plomo es la conducta del narcotráfico y los mercados se disputan a balazos.
El camino (que propone) es un poco distinto. Cien años reprimiendo y cada vez tenemos un mayor consumo ilegal de drogas, comparable a la ley seca de Estados Unidos.
P.- ¿Qué futuro tiene Mercosur frente a nuevas formas de integración en el continente, como la Alianza del Pacífico u otras?
R.- Aspiramos a que en algún momento todas se puedan juntar y ello va a depender en gran medida de la apertura de los gobiernos. Uruguay va a hacer todo lo que pueda para favorecerlo.
P.- ¿Por qué se ha retrasado la Cumbre de Mercosur, prevista para el 28 de junio en Montevideo? ¿Se trata de dar tiempo a que asuma el presidente electo paraguayo, Horacio Cartes, el próximo agosto, y pueda levantarse la suspensión a ese país, y que, a su vez, el Senado de Asunción también apruebe el ingreso de Venezuela?
R.- Así es. Es para que Paraguay pueda ingresar como corresponde. Es un país muy importante, así como también Venezuela es muy importante dentro de Mercosur.
A los que no les gusta su régimen, tienen derecho a pensar así, pero los gobiernos pasan y los países quedan y Venezuela es un país con una gran fuerza energética. ¡Tontos de nosotros si no nos las ingeniamos para que funcionen dentro de Mercosur¡.
P.- Usted que ha sido guerrillero, ¿cómo ve el proceso de negociación en marcha entre el Gobierno colombiano y las FARC?
R.- Es lo más importante que esta pasando en América Latina. Todos los esfuerzos para que Colombia pueda terminar en una negociación 50 años de guerra merecen todo el apoyo de la sociedad mundial.
Los conflictos armados ya no solucionan nada y no hacen bien a nadie. Las primaveras árabes se iniciaron con violencia y no parece que las sociedades vivan mejor. Son expresiones de un momento. En algunos lugares incentivaron una especie de fanatismo que no acompaña la época moderna.
No hay que querer imponer lo que pensamos, hay que respetar a todo el mundo.
P.- En Uruguay ha generado críticas con sus comentarios de que en su país nadie muere por exceso de trabajo y que ello puede dañar la imagen exterior. ¿Fue malinterpretado?
R.- Fui bien interpretado, con interés político. Trabajamos más o menos a media máquina y estamos bien. Los seres humanos no hemos venido a la tierra para morir trabajando. Hay que vivir bien y no trabajar tanto como los chinos. Pero digo lo que constato: podríamos ajustar un poco con los tiempos.
P.- Hace pocos días reapareció, a través de la prensa uruguaya, un compañero suyo en la guerrilla tupamara, Amodio Pérez, que les delató a los militares y hace 41 años que no se sabía nada de él. ¿Por qué cree que sale ahora a la luz pública?
R.- No tengo ni idea, y tampoco le doy bola.
P.- ¿Cómo es su relación con la presidenta de Argentina, después de recientes desencuentros, provocados por comentarios suyos sobre su personalidad?
R.- La relación es buena, con el país y su presidenta. En política sigue habiendo bastante machismo y la presidenta (argentina) a veces por eso tiene que adoptar en ocasiones una actitud más fuerte.
P.- Presidente, usted vive con austeridad su vida privada y pública. ¿Deberían otros gobernantes y cargos públicos seguir su ejemplo?
R.- Yo soy sobrio en mi manera de vivir, liviano de equipaje, como decía Antonio Machado. Si tengo una casa y una vida muy complicada y mucha riqueza que cuidar, no tengo tiempo para hacer lo que me gusta.
Los gobernantes deberían siempre dar ejemplo y recordar que no se llevan nada en el cajón. Yo lo hago por mi propia concepción de la vida.
Estuve catorce años preso y cuando me ponían un colchón me sentía feliz. No se necesita mucho…
P.- ¿Viene a España a plantear posibles inversiones de empresas españolas en su país?
R.- La relación con España es sustentable y es el segundo inversor extranjero, después de Argentina en empresas productoras y de servicios.
A los bancos (españoles) les ha ido muy bien en Uruguay y son un trampolín para que se incremente un horizonte bastante favorable. Están planteadas eventuales inversiones en la industria de la pesca.
¡Ciao piba", se despidió el presidente uruguayo en su estilo campechano, comentando que en los próximos días se desplazará a la localidad vasca de Muxika, de la que dijo que proceden sus antepasados. EFE
Jueves 30/05/13