Un grupo de musulmanes demandó hoy ante un tribunal federal de Manhattan a la Policía de Nueva York, a la que acusa de mantener un programa de vigilancia sistemática contra ese grupo por motivos religiosos y sin pruebas de actividad ilícita.
De acuerdo con la demanda, que pide a la corte que se ponga fin al programa de vigilancia de musulmanes, la Policía ha sostenido esa práctica ilegal desde 2002 bajo la premisa -que considera falsa e inconstitucional- de que sus creencias religiosas y su práctica son fundamento para dicha política.
La demanda ha recibido el apoyo de la Unión de Libertades Civiles (ACLU) y otras organizaciones legales, entre ellas la Escuela de Leyes de la Universidad de la Ciudad de Nueva York (CUNY), según indicaron en un comunicado en el que anunciaron la querella.
Los demandantes han pedido al tribunal que se prohíban futuras vigilancias basadas sólo o predominantemente en creencias religiosas, sin que haya sospechas de actividad criminal.
Han pedido además al tribunal que se designe a una persona para que se asegure que la ciudad de Nueva York realmente ha puesto fin "a todas las prácticas inconstitucionales" relacionadas con creencias religiosas.
El documento legal añade que, según muestran los propios registro de la división de Inteligencia de la Policía, esa vigilancia a líderes religiosos, negocios, organizaciones, mezquitas e individuos musulmanes no ocurre con ningún otro grupo religioso.
La demanda agrega que esa práctica ha incluido infiltrar a policías e informantes en mezquitas y escuchar las conversaciones de los que allí se han congregado y sus líderes religiosos, sin ninguna sospecha de que estén cometiendo un delito.
Se alega además en la demanda que la policía ha conducido otras formas de vigilancia a musulmanes, organizaciones e instituciones, incluso a través del uso de informantes. Ha vigilado además páginas web, blogs y otros foros en internet.
La demanda cita varios casos de personas afectadas por esta vigilancia.
Por ejemplo, Hamid Hassan Raza, iman de una mezquita de Brooklyn, ha estado grabando por años sus sermones porque tiene miedo de que un policía encubierto o un espía de la policía lo cite erróneamente o tome partes de sus sermones fuera de contexto, exponiéndole a él o a la mezquita a mayor escrutinio.
Incluso, luego de que agentes en ropa de civil lo visitaran en repetidas ocasiones, se ha abstenido de hablar de temas que la Policía de Nueva York pueda considerar controvertidos y ha hecho un llamado a los miembros de su mezquita a que hagan lo mismo.
Raza asegura en la demanda que ha visto una merma en el número de personas que acuden a su mezquita como resultado del programa de vigilancia de musulmanes de la Policía de Nueva York.
El programa de vigilancia "ha impedido que cumpla con mi deber como iman", indicó Raza en el comunicado.
"La Policía de Nueva York está supuesta a proteger a los neoyorquinos pero en su lugar estigmatiza cientos de miles de miembros de una comunidad", señaló Arthur Einsenberg, director legal de la Unión de Libertades Civiles. EFE
Martes 18/06/2013