El gobierno de Nicaragua cuestionó hoy el anuncio de Costa Rica de enviar una misión ambientalista a una zona fronteriza en litigio, y le recordó a ese país que no puede navegar sobre el sureño río San Juan con fines que no sean comerciales.
Lo anterior figura en una nota que el canciller Samuel Santos envió este miércoles a su par costarricense, Enrique Castillo, quien ayer le informó que San José enviará personal a evaluar la situación de un humedal ubicado en el sector de Isla Calero o Harbour Head.
Costa Rica alega que Nicaragua abrió dos canales en el sitio en disputa para conectar el San Juan con el Mar Caribe, lo cual fue negado por el delegado gubernamental en la zona, Edén Pastora, quien dijo que solamente se está "limpiando la desembocadura" del río.
En su nota de ayer, Castillo anunció que el gobierno pidió a expertos costarricenses y a la Convención internacional sobre Humedales (RAMSAR) monitorear el caso, ya que estiman que Nicaragua ha cometido graves daños ambientales en el lugar.
Santos respondió que cualquier envío de personal civil a la zona "debe ser consultado de forma previa con RAMSAR y notificado a Nicaragua", según lo dispuesto en una sentencia de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que conoció el caso.
El canciller también recordó, ante el posible uso de embarcaciones costarricenses por el río San Juan, que los derechos de navegación de Costa Rica en la zona están limitados "única y exclusivamente con fines de comercio", según lo confirmó la CIJ con base en el tratado de límites Jerez Cañas de 1858.
Para Santos, las denuncias de San José responden a "una escalada verbal" contra el gobierno de Daniel Ortega, que "pareciera tener por propósito insertarse en la campaña orquestada por otros países de la región en contra de Nicaragua".
El canciller aludió aparentemente a las tensiones que Managua enfrenta con Colombia a causa de una disputa de límites en el Mar Caribe, y a las expresiones de apoyo que Bogotá recibió en días pasados de Costa Rica, Panamá y Jamaica. /DPA