EFE
La ONU denunció hoy que el grupo yihadista Estado Islámico continúa con las ejecuciones de personas de minorías religiosas y étnicas, pero también de suníes -su propia rama del islam- que no aceptan jurarles lealtad.
"Estamos recibiendo cada vez más informaciones sobre ataques sistemáticos contra individuos suníes que rechazan declararles su lealtad", dijo la portavoz de la Oficina de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Ravina Shamdasani.
A ello se agregan los crímenes contra grupos étnicos y religiosos no suníes, mediante asesinatos, secuestros, destrucción de propiedades y de lugares de significado cultural y religioso.
Las últimas denuncias recibidas tienen que ver con la ejecución en los últimos días de agosto de catorce ancianos de la minoría yezidi tras el asalto por parte de milicianos del Estado Islámico de una aldea de Sinyar (provincia iraquí de Nínive).
En la ciudad de Mosul (capital de Nínive), que el grupo extremista controla desde principios de junio, éste estableció un tribunal propio que ordenó la ejecución de varios hombres, mientras que en otro evento secuestraron a siete cristianos, entre ellos una niña de tres años.
La ONU también tiene datos sobre la ejecución reciente de efectivos de las fuerzas de seguridad iraquíes y de una veintena de hombres suníes en la provincia de Diyala por no aceptar su autoridad.
Se ha reportado que los enfrentamientos entre el Estado Islámico y el Ejército iraquí prosiguen en las provincias de Nínive, Diyala, Anbar y Salah al-Din, lo que hace muy difícil aportar cualquier ayuda humanitaria a la población que está atrapada en las hostilidades.
La ONU también informó de que ha lanzado una nueva petición de fondos entre los donantes a favor de Irak, por 315 millones de dólares, para poder continuar con su operación de ayuda frente a las necesidades masivas de la población.
La situación de violencia en Irak ha conducido a 1,8 millones de personas al éxodo únicamente desde el pasado enero.
2014-09-05