La alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay, se unió hoy a las voces que reclaman que se investigue el uso de armas químicas en un ataque contra civiles en Siria y reveló que dispone de información que indica que hay "miles de heridos que necesitan desesperadamente atención médica".
El personal de su organismo en la región ha logrado entablar contacto con fuentes fidedignas dentro de Siria, las que han reportado que, además de los muertos, "hay miles de heridos que requieren atención médica y ayuda humanitaria", sostuvo.
Zonas de la localidad atacada, Guta, ya habían sufrido ataques armados previos, así como graves recortes de víveres días antes de los hechos de ayer, cuando se cree que murieron cientos de civiles, incluidos niños y mujeres. EFE