EFE
El presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, negó por activa y por pasiva su participación en el caso "La Línea", y dijo que los audios en los que aparece su voz para cambiar a un empleado en la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) obedece a una preocupación por "la falta de recaudación".
El primer mandatario apeló a la presunción de inocencia para defenderse de las acusaciones en su contra, que lo sindican de liderar la red de corrupción aduanera conocida como "La Línea".
En una conferencia de prensa celebrada en la Casa Presidencial, el mandatario dijo que las pruebas en su contra no son suficientes para demostrar su vinculación con la estructura criminal, que, según las autoridades, defraudó millones de dólares al Estado.
"No recibí ni un centavo", proclamó enérgico, aunque reconoció que, como seres humanos, durante su mandato se cometieron errores, pero que, en el momento, creía que las decisiones adoptadas eran las mejores para el país.
Durante una hora, el funcionario cuestionó "la seriedad" y "el fundamento" no solo de las evidencias en su contra, sino también de la actuación del MP y la CICIG porque, recordó, cuando la fiscal general se postuló como magistrada de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) la CICIG la "vetó".
2015-08-31