El gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) de México dijo hoy que quiere ganar "holgadamente" las elecciones estatales del domingo y que no va a competir "rezando" para perder sólo por evitar tensiones en el pacto que tiene con la oposición para sacar adelante reformas.
"Independientemente de quién triunfe el 7 de julio si no hay acuerdos en el pacto vamos a perder todos los mexicanos. Debe el pacto tener su propia dinámica, su propio calendario, su propio alcance", dijo el presidente del PRI, César Camacho, en un encuentro con medios internacionales.
El presidente del Partido Acción Nacional (PAN, oposición), Gustavo Madero, acusó hoy al PRI, que gobernó de 1929 a 2000, de pretender restaurar prácticas autoritarias. "Le están saliendo las garras al monstruo, al dinosaurio", afirmó.
Una serie de asesinatos, ataques contra candidatos y denuncias de trampas electorales han marcado el tramo final rumbo a los comicios, en los que se renovarán un gobernador, alcaldes y diputados en 14 de los 32 estados del país, además de que se cubrirá un sitio vacante de diputado federal en otro.
Camacho desestimó algunas de las denuncias de violencia política hechas por la oposición, en particular el secuestro de cinco horas que asegura haber sufrido el martes Carlos Valenzuela, candidato a regidor por parte del PAN en el estado de Veracruz.
Hay casos que parece "más bien que han sido montajes para crear una sensación de desazón", dijo Camacho. Las denuncias, "además de ser mediáticas deben ser jurídicas" porque de lo contrario parecen "la justificación anticipada de una derrota", agregó.
Los comicios del domingo, que involucran a un 37 por ciento del padrón nacional, son los primeros que se harán en México desde la victoria electoral de Enrique Peña Nieto como presidente hace un año y el retorno del PRI al poder.
El plato fuerte es la gobernación de Baja California, que el PRI perdió hace 24 años frente al PAN y que considera "emblemática" porque fue la primera que perdió en la historia. En los demás estados sólo se elegirán alcaldes y diputados locales.
Aunque se tratan de comicios regionales, podrían tener impacto también en la agenda nacional por el ambiente que se ha generado, más tensiones que enfrentan en sus propias filas los líderes de los partidos de oposición.
El PRI, el PAN y el Partido de la Revolución Democrática (PRD, izquierda) integran el Pacto por México, un acuerdo de concertación política de 95 puntos para sacar adelante reformas estructurales. El próximo capítulo son la controvertida reforma energética y la fiscal.
"Nuestra obligación es blindar el pacto porque ha resultado un instrumento eficaz para hacer política y lograr acuerdos", señaló Camacho, aunque reconoció que el pragmatismo político sugiere que el acuerdo y las elecciones "están irremediablemente vinculados".
"Tengo claro que pudieran algunos actores del Pacto por México dolerse de algunas cosas que ocurran en los estados y tratar de vincularlas al Pacto por México. Creo que no es correcto porque son temas que deben caminar por cuerda separada", dijo Camacho.
"Yo haré un esfuerzo, porque esa es mi convicción, por que no estén vinculados (pero) si nosotros, cualquiera sea el resultado, ganamos y los tribunales confirman nuestros triunfos, me parecería una concesión gratuita decir ‘en tal o cual lugar me dejo perder para que el pacto sobreviva’. Me parece una broma de mal gusto", dijo.
"No vamos a ganar en todas partes, casi diría es natural, pero yo no puedo actuar irresponsablemente deseando, voy exagerar, rezando porque no gane el PRI porque de eso depende que los partidos no se levanten de la mesa del Pacto por México. Yo voy a trabajar por ganar legítimamente en el mayor número de lugares posibles".
Madero dijo hoy en una entrevista con MVS Radio que Peña Nieto no está haciendo nada frente a las irregularidades que se están presentando y que el PRI pretende "restaurar el régimen autoritario". "Estamos regresándonos a la prehistoria cavernícula del priismo", afirmó.
Camacho dijo que para él tanto Madero como el líder del PRD, Jesús Zambrano, "han hecho un gran papel en la mesa del pacto" y son interlocutores sólidos y confió en que el resultado electoral no repercuta internamente en sus partidos en relación al pacto. /DPA