EFE
Miles de personas salieron hoy a protestar en Minsk y otras ciudades de Bielorrusia país contra la investidura del presidente del país, Alexandr Lukashenko, que juró el cargo esta mañana en una ceremonia no anunciada a la opinión pública.
Varios miles de personas se congregaron en el centro de la capital bielorrusa, Minsk, e incluso bloquearon la Avenida de los Vencedores, según informan medios locales.
Además, columnas de manifestantes se dirigen hacia la Estela de Minsk, escenario de los violentos choques en la noche electoral del 9 de agosto, y el Museo de la Gran Guerra Patria.
Los medios informan ya de varias decenas de detenidos y heridos en los primeros enfrentamientos entre manifestantes y efectivos antidisturbios, que utilizan gas lacrimógeno y mangueras de agua para dispersar a los congregados.
Entre los heridos, figura una anciana, varios hombres brutalmente golpeados, una mujer con la cabeza ensangrentada y una tercera que fue golpeada por un policía en el estómago.
Entre los efectivos policiales se ven muchos vestidos con ropa negra, acusados por los activistas de derechos humanos de un desproporcionado uso de la fuerza.
En previsión de protestas antigubernamentales, las autoridades desplegaron horas antes furgones y autobuses policiales en varias zonas de la capital.
La policía también ha procedido a detener a decenas de personas en ciudad como Brest, Vitebsk o Moguiliov.
"¡Minsk, estamos contigo!", gritan los manifestantes.
En una atmósfera de total secretismo, Lukashenko fue investido hoy en el Palacio de la Independencia de Minsk, juramento que fue rechazado hoy por varios países europeos como Alemania, Polonia, la República Checa, Eslovaquia y los tres países bálticos.
"No puedo ni tengo el derecho de abandonar a los bielorrusos que han vinculado con el rumbo estatal no solo sus preferencias políticas sino también su destino y el futuro de sus hijos", afirmó Lukashenko, citado por la agencia estatal BELTA.
Lukashenko, en el poder desde 1994, aprovechó para elogiar la actuación de las fuerzas de seguridad.
La líder de la oposición unificada, Svetlana Tijanóvskaya, que recibió esta semana el respaldo de la Unión Europea en su primera visita a Bruselas, tachó de "farsa" la investidura.
"En realidad, Lukashenko hoy se ha jubilado", aseguró desde su exilio en Lituania.
Según Tijanóvskaya, ella es "la única líder elegida por el pueblo bielorruso" y que las órdenes que pueda dar Lukashenko a las fuerzas de seguridad carecen ya de fuerza legal y "no han de ser cumplidas".
2020-09-23
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