La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, anunció que su país llevará el caso de supuesto espionaje a ciudadanos brasileños por parte de Estados Unidos al seno de las Naciones Unidas.
"Vamos a presentar la propuesta a la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, pues uno de los preceptos fundamentales es la garantía de la libertad de expresión, pero también de los derechos individuales, principalmente el de la privacidad, que también está garantizado en nuestra Constitución", declaró Rousseff a periodistas.
El diario O Globo de Río de Janeiro publicó un reportaje en el que reveló que Brasil, al igual que la mayoría de los países del mundo, había sido espiado por los programas de rastreo de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA, por su sigla en inglés).
El reportaje usa datos filtrados por el exanalista de la CIA Edward Snowden, que está hace dos semanas en Moscú a la espera de que algún país le conceda asilo político.
"Si hubo participación de otros países y de otras empresas que no sean brasileñas seguramente hay también violación de soberanía, sin lugar a dudas, como también violación de los derechos humanos", justificó Rousseff.
La mandataria, sin embargo, pidió prudencia para investigar "sin precipitación ni prejuicio", y aseveró que la posición de Brasil "es muy clara y firme: No estamos de acuerdo, de ninguna manera, con una interferencia de este orden no sólo en Brasil sino en cualquier otro país".
La Cancillería pidió explicaciones al embajador de Estados Unidos en Brasilia, Thomas Shannon, y la legación diplomática brasileña en Washington hizo lo mismo con el Departamento de Estado.
Rousseff indicó que el Ministerio de Comunicaciones y la reguladora Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) investigarán la participación de empresas brasileñas en los supuestos actos de espionaje y anunció que el Gobierno pretende modificar la legislación sobre internet.
"Vamos a revisarla, porque uno de los asuntos que debemos observar es dónde se almacenan los datos y muchas veces los datos son almacenados fuera de Brasil, principalmente los de Google, y queremos entonces la obligación de almacenamiento de datos de brasileños en Brasil", apuntó.
Según Rousseff, una investigación sobre el asunto "es importante, para saber todo lo que hay de verídico".
"Sobretodo, Brasil tiene que dar garantías y tiene que construir una legislación que dé seguridad a los derechos humanos y a la privacidad de cada persona, de cada ciudadano, y en segundo lugar, no necesariamente en este orden, la garantía de soberanía de Brasil", consideró la jefa de Estado./EFE
Lunes 08/07/2013