La agencia investigadora rusa dijo que desistió de los cargos de piratería contra los activistas de Greenpeace detenidos y en cambio los acusó de vandalismo.
La declaración del Comité de Investigación parece presagiar una rápida liberación de los activistas, detenidos el mes pasado durante una protesta en una plataforma petrolera en el Artico. El cargo de piratería conlleva una pena de 15 años de cárcel, mientras que el vandalismo se castiga con siete años como máximo.
El mes pasado, el presidente ruso Vladimir Putin dijo que en su opinión los activistas de Greenpeace no eran piratas.
Un grupo de 28 activistas de la organización ecologista, un fotógrafo ruso y un videógrafo británico están presos desde el de septiembre cuando la guardia costera rusa se apoderó de su buque, el "Arctic Sunrise", tras una protesta junto a una plataforma petrolera de Gazprom.
Greenpeace no hizo declaraciones de inmediato./ap