Roberto Romanelli | [email protected]
El Gobierno nacional sigue pujando para elegir a una Asamblea Nacional Constituyente, que tendrá plenos poderes y un plazo indefinido para redactar una nueva Carta Magna, pese al rechazo mayoritario de los venezolanos.
Impopular. El último sondeo de la firma Datanálisis determinó que el 85 por ciento de los encuestados rechaza cambiar la Constitución.
“No es necesario cambiar la Constitución actual. Lo que el Gobierno debe hacer es cumplirla”, señalaron en abrumadora mayoría. Sólo 12,5 por ciento estuvo de acuerdo con la convocatoria a la ANC del jefe de Estado.
La encuesta también mostró que 80 por ciento de los entrevistados estaba al tanto de la propuesta del presidente Nicolás Maduro de instalar una Asamblea Constituyente para rescribir la Carta Magna y de ellos 69,1 por ciento, rechazó la propuesta.
Para la Red por la Defensa al Trabajo, la Propiedad y la Constitución, la iniciativa presidencial tiene el más alto rechazo que propuesta de gobierno alguno haya obtenido en los últimos 60 años.
“Lo cual, es antagónico a la voluntad de la mayoría de los venezolanos al tener menos de un 20 por ciento de apoyo popular”, señaló.
La ANC de Maduro ha encontrado cada vez mayor resistencia entre propios y extraños.
La fiscal general, Luis Ortega Díaz, magistrados del TSJ, exfuncionarios y aliados del gobierno se han sumado al rechazo de la oposición a la Constituyente, por no ser consultada al pueblo ni ser votada por todos, sino por determinados electores.
“Sin duda, el gran error de Maduro es la constituyente. Se le dividió el chavismo, solidificó a la oposición y tiró la gente a la calle”, observó el analista Leopoldo Castillo.
A trocha y mocha. Como en otras ocasiones, altos voceros del oficialismo han arremetido contra quienes se oponen a sus planes.
“Hasta ahora los llamados a la constituyente y ustedes periodistas son testigos de excepción, han sido llamados violentos: los vamos a aniquilar con la constituyente, he oído; los vamos a poner presos; estamos obligados a apoyar la constituyente porque si no serán enjuiciados por traición; serán encarcelados; frases agresivas y amenazantes; quienes no acepten la constituyente son traidores; quienes no acepten la constituyente son fascistas o terroristas”, denunció la Fiscal tras pedir al TSJ que anule todos los actos de la ANC.
La propia Luis Ortega Díaz ha sido la primera víctima de los ataques del oficialismo: Apenas 24 horas después de conocerse públicamente su posición sobre el tema, el oficialismo instaló dos tarimas con equipos de sonidos frente a la sede de su despacho.
En el lugar, con poca presencia de manifestantes, un grupo vocea consignas y arengas contra Ortega, mientras en las redes tuiteros simpatizantes del gobierno también cuestionan su actuación.
El primer vicepresidente del Psuv, Diosdado Cabello, la acusa ahora de ser “un agente de la oposición” y le dio su preaviso: “a esa Fiscalía le quedan 53 días, ni uno más”, en alusión a la fecha de elección de la ANC.
El diputado Pedro Carreño fue más allá todavía y propuso que el TSJ realice un juicio por “insania mental”. “Para preservarle la vida a esa señora hay que recomendarle la reclusión”, acotó.
Presión a pensionados. Sectores de oposición denunciaron que desde el gobierno se presiona a ciudadanos pensionados de los entes públicos para que firmen las planillas de postulados a la ANC. Estas personas son llamadas a presentarse ante las alcaldías de su municipios y luego los ponen a firmar la planilla, mediante engaño. Igual estaría ocurriendo con la entrega de los carnets de la Patria.
Sin sentido. El exministro del Interior y Justicia de Maduro, Miguel Rodríguez Torres, ha señalado que “contrario a lo esperado por el Gobierno, la convocatoria a una ANC ha generado mayor indignación en el pueblo y una evidente fractura dentro del sector chavista”, y pidió al Presidente que la “suspenda y evite males mayores”.
“Esa constituyente no tiene sentido imponerla cuando el 80% de los venezolanos se opone a ella, por lo tanto es innecesaria”, enfatizó.
No obstante, Maduro asegura que la Constituyente “sí va” y llama a votar el 30 de julio “llueve truene o relampague” para elegir a los constituyentistas. “Ese es el plan del imperialismo norteamericano y sus lacayos internos, sus grupos que han derivado en una violencia extremista. Sé que el plan de ellos es evitar que el pueblo vaya a la constituyente, que el pueblo vote”, ha dicho en reiteradas oportunidades el Jefe de Estado.
2017-06-10