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Más billetes al cono monetario genera dudas

Domingo, 13 de noviembre de 2016 a las 08:00 pm
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Alejandra Pabón

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Para Miguel Ángel Díaz, economísta, la emisión de billetes de mayor denominación en el país "es una medida tardía del Gobierno Nacional". Considera que hace cinco años debió ser adaptado el cono monetario para que se ajustara a la realidad inflacionaria que vive el país.

"Los anuncios de que a finales de este año habrá billetes de mayor denominación circulando en el país es un reconocimiento a la alta inflación que tenemos en Venezuela. El Gobierno está siendo obligado a actualizar el cono monetario para simplificar las transacciones", explicó.

El también dirigente de Voluntad Popular en el estado Zulia, aseguró que la emisión de nuevos billetes tiene que venir acompañada de otras medidas que frenen la inflación. "El nuevo cono monetario será insuficiente si no se controla la inflación o de lo contrario en pocos meses habrá perdido vigencia", dijo.

El especialista en materia económica señaló que en Venezuela hay un déficit fiscal que debe ser corregido frenando la emisión de dinero inorgánico.

"En enero de 2016 teníamos cuatro billones de bolívares circulando, lo que representa un incremento de la liquidez monetaria de 586%, causa principal de que en el país tengamos la inflación más alta del planeta. Para que la actualización del cono monetario sea efectiva se tiene que frenar la emisión de dinero y estimular la producción nacional", subrayó.

Por otra parte, José Grasso Vecchio, analista financiero, sostiene que la impresión de nuevos billetes es sumamente necesaria, dado que el billete de 100 bolívares ya no puede representar el de mayor denominación en Venezuela.

Asimismo, Grasso señaló que ante la reestructuración del cono monetario estarían favorecidos la banca, los comercios y los consumidores.

El dato


Para mayo del presente año, la Comisión de Finanzas y Desarrollo de la Asamblea Nacional, presidida por el diputado y economista José Guerra, presentó una propuesta para actualizar el cono monetario que fue establecido en enero de 2008. Esto, porque a juicio de la Asamblea, el bolívar que se sometió a una reconversión hace ocho años, hoy ha perdido su valor, pues entre enero de 2008 y mayo de 2016, la inflación acumulada es de 3.586 %.

El oficio dicta que para aquel entonces el billete de mayor denominación -Bs. 100- equivalía a 46 dólares, a la tasa de cambio oficial. "Actualmente, es literalmente imposible realizar cualquier cálculo del valor de ese billete en términos de US$, debido a la proliferación de tasas de cambio".

Entre los años 2008 y 2014, la cantidad de nuevos billetes emitidos acumuló un crecimiento de 165%. En 2015 la cantidad de esos billetes disminuyó debido a las restricciones en el acceso a la materia prima importada. Por ello, se aprecia una notable ausencia de piezas monetarias.

La elaboración de un billete es un proceso altamente intensivo en materias primas importadas, principalmente papel especial, tinta y elementos de seguridad para evitar las falsificaciones. Se estima que el costo de imprimir un billete de Bs. 100 promedia los US$ 0,20. Ello permite calcular que en 2015 los nuevos billetes que puso a circular el BCV de esa denominación le costaron al ente emisor US$ 3.900.000.

El argumento que se puede esgrimir en contra de la actualización del cono monetario es que al aumentar el monto de cada billete se generaría más inflación. Ello carece de cualquier sentido, debido a que es el aumento sostenido de la cantidad de dinero la que genera la inflación. La actualización del cono monetario expresa la inflación, y facilita las transacciones, mas no genera inflación.

Actualizar el cono monetario implica utilizar un conjunto de indicadores, entre otros, el salario promedio semanal o diario, la pérdida del poder adquisitivo de la moneda y la tasa de inflación acumulada entre la última fecha de ajuste de la familias de monedas y billetes y el momento actual. Acá se emplea este último criterio, con la estimación de la tasa de inflación hasta el cierre de 2016 y la expectativa de depreciación del bolívar.

Consecuencias. "Las personas reducirían su idas al banco. Asimismo, el pasaje disminuye; los cajeros dispensarían montos mayores, y mejora la seguridad al portarse menos billetes".

2016-11-14