Mildred Manrique Rojas / @MilManrique
Una tendencia que “no se da en todos, pero sí se da más que antes”, es la sobrevivencia de los actores políticos; sobre todo en la generación de relevo, según analistas. Las migraciones de jóvenes de un partido a otro, y hasta los saltos de talanqueras marcan la nueva forma de hacer una política “errada” debido a la misma crisis que enfrenta el país, advierten Justo Morao y Manuel Malaver.
Para los especialistas en el área política es normal que Juan Requesens haya dejado de militar en Acción Democrática para irse a Primero Justicia, al igual que lo hizo Miguel Pizarro y José Manuel Olivares, por ejemplo. “Y se van a seguir viendo más cambios”. En su opinión, Morao siente que las migraciones se seguirán dando, porque los partidos de oposición se están fragmentando en cuestiones de alianzas, y en su limitación para ponerse de acuerdo.
“Ya veremos cómo surgen y seguirán surgiendo pequeños partidos. Los jóvenes que están en la política actual no están tan apegados a la filosofía e ideología que unía antes a los partidos. Son desapegados y no mueren por una causa sino que se van adaptando a las situaciones y es porque están viviendo la crisis”, dijo.
Por su parte, Malaver dice no estar convencido de que halla una generación de relevo en este momento, “porque la situación del país no da la oportunidad. En estos tiempos modernos hay ideas de las generaciones pasadas que se mantienen pero que no surten efecto en la nueva era donde las necesidades superan los ideales”, aseveró.
También considera que los jóvenes se cambian, primero “porque están en su derecho. Pero también porque llega un momento en que no se sienten contentos con las líneas de su partido, eso no significa que esto pueda producir un salto de talanquera”, aclaró.
Pero hay varios antecedentes en este aspecto, por ejemplo, el de Ricardo Sánchez, joven que venía del Movimiento Estudiantil de 2007, militó en Un Nuevo Tiempo y ahora se fue al Polo Patriótico. “El caso de Ricardo Sánchez me sorprendió mucho porque se veía como un joven centrado. Es difícil identificar a alguien que pueda prestarse a saltar la talanquera, pero sí se puede identificar por sus ideales y prever complicaciones. Sin embargo, en Venezuela se da fácilmente cuando hay un gestor (Gobierno) que es muy seductor al ofrecerle millones de dólares”, explicó al 2001, Manuel Malaver.
Justo Morao coincidió con su colega. Sostiene que “la política es una carrera de vocación, como la de un médico. Es la voz de una parte de la sociedad, pero que actualmente los nuevos políticos creen que es una carrera para enriquecerse y lucirse en una socialité”, criticó.
El analista recordó que entre los 50 y 70 esto no ocurría. “Esa generación fue muy consolidada. Muchos estuvieron presos, se escondían, en el caso de los adecos y copeyanos; los torturaban y nunca pudieron derrumbar sus ideales porque eran jóvenes muy enmarcados en lealtad a su creencia y partido. Esto no ocurre actualmente”, aseguró.
Morao y Malaver no descartan que surjan nuevas alianzas y migraciones, e incluso fracturas y daños internos en ambos sectores. Advierten que eso solo seguirá contribuyendo con el descontento de la sociedad venezolana.
“Hoy en día los venezolanos están mejor informados de lo que es la política. Antes había más confianza de la sociedad hacia ellos, hoy no es así, bien sea de la oposición o del oficialismo”, sostienen al tiempo que, opinan que “hay quienes tienen alma de políticos de verdad".
Más información en su diario 2001
2015-09-10