Nayzai Saavedra
Los especialistas consideran que el Sistema Eléctrico Nacional (SEN) se encuentra en un estado crítico e inestable, por lo que en el marco del Día Mundial de la Eficiencia Energética, reiteran lo que han venido advirtiendo en los últimos años, que la crisis llegó para quedarse.
El presidente de la Comisión Eléctrica del Colegios de Ingenieros de Venezuela y de la Asociación Venezolana de Ingeniería Eléctrica, Mecánica y Profesiones Afines (Aviem), Winston Cabas, indicó que analizando la situación desde el área de la generación se tiene que hay un aproximado de 18 mil megavatios termoeléctricos instalados, de los que solo se disponen tres mil. Además existen entre 14 y 16 mil megavatios hidroeléctricos de los que solo se disponen entre 9 y 10 mil.
Cabas indica que no se puede hablar de eficiencia energética en Venezuela, solo se tiene un aproximado de 12 mil megavatios hidroeléctricos y termoeléctricos a disposición del servicio y eso cubría la demanda que tenía el país entre 1988-1990.
Explica que se llegó hasta este estado porque los responsables no realizaron las sustituciones de transmisión, por la obsolencia de los equipos en uso, por la falta de mantenimiento y de actualizaciones que necesitan los componentes involucrados, por lo que cualquier falla que se genera impacta severamente en el sistema entero, lo que explicaría los apagones generalizados recientes que se vivieron el pasado mes de febrero.
“Estoy hablando de subestaciones de transmisión con más de 30, 40 años instalados, equipos con vida útil superada. Ocurre que por las violaciones sistemáticas al plan de desarrollo del SEN, un mantenimiento que debía realizarse cada cinco meses, debía acortarse al menos a dos y esto no se cumplió”, explicó.
El especialista agregó que a la crisis de generación se le suma que más del 80% del recurso humano técnico y profesional se ha ido del servicio, razón por la cual una falla que se puede resolver en corto tiempo, se dilata. Estas renuncias continuas no representarían un problema en circunstancias normales porque las plazas podrían cubrirse rápidamente, sin embargo, el adiestramiento de Corpoelec está cerrado desde hace más de cinco años.
Por otro lado, rechazó la tesis presentada por el Gobierno de que está orquestado un plan de sabotaje en contra del SEN. Cabas recordó que se supone que todas estas instalaciones están siendo custodiadas por la Fuerza Armada Nacional, destacando que por esta razón incluso a una comisión de la Asamblea Nacional se le impidió el paso.
“Las fallas son consecuencia del deterioro. No se están tomando medidas ni haciendo esfuerzos. No le han dicho la verdad a los ciudadanos, pero ¿Quién les cree que es el imperio Norteamericano? Ese es el cuento de Pinocho”, sentenció.
El ingeniero opinó que los venezolanos se encuentran bajo un Estado fallido, tiene conocimiento de asambleas de ciudadanos que han tenido que pagar a Corpoelec de sus bolsillos para realizar reparaciones de transformadores que se han dañado.
Para Cabas la principal medida que debe tomarse para la solución de los múltiples problemas es que el Gobierno renuncie porque “no tiene las competencias y son incapaces de recuperar el SEN”.
El adiestramiento del recurso humano está entre las decisiones más inmediatas, junto a la aprobación del contrato colectivo de los empleados para seguir evitando fugas, la puesta en marcha de los mantenimientos y sustituciones que han sido dejadas de lado y una inversión dirigida.
“En los últimos cinco años se habla de más de 40 mil millones de bolívares invertidos en el sistema, incluso llegaron a decir que Caracas está blindada y ya hemos comprobado que no es así”, concluyó.
Panorama. La presidenta del Comité de afectados por los apagones, Aixa López, indicó que el balance que se tiene hasta el momento es de más de 1.855 fallas a nivel nacional en los últimos seis meses, explicando que no solo se trata de los apagones que pueden durar minutos o incluso horas, sino también de los bajones.
En este sentido, López explicó que estas fallas repercuten en la vida del ciudadano común: “Los que viven en condominios el agua no les llega porque es impulsada por la energía, el comercio se paraliza, se caen las plataformas, aunado a que no hay efectivo, el sistema metro deja de funcionar y el transporte superficial no se presta para atender a la población, todo se vuelve un caos”.
Por otra parte, los usuarios le indican al comité que están preocupados porque se les vayan a dañar equipos electrónico. Hay que destacar que no siempre se reportan los apagones que hay, sobre todo si se da en un sector, pero la representante indicó que estas fallas están generándose con más frecuencia.
López aprovechó para decirle a la ciudadanía que la tesis del sabotaje no tiene fundamento ya que lo que está sucediendo en los 365 municipios se debe a la falta de mantenimiento, destacó -al igual que Cabas- que desde mayo de 2013 las Fuerzas Armadas resguardan las estaciones y subestaciones: “El Gobierno habló de un plan especial contra el sabotaje. Pero, si ya tienen el resguardo del sistema eléctrico ¿De qué se van a ocupar? ¿Es que no se está cumpliendo”, preguntó.
Y aclaró que aunque es cierto que alguien puede acercarse y “cortar unos cables”, eso no tan simple ya que se necesita mínimo una herramienta especial, guantes y botas de seguridad para no electrocutarse.
“Nuestros contactos que tenemos en las subestaciones indican que la industria eléctrica tiene una planificación a corto, mediano, largo plazo y no se están llevando esos protocolos”, aseguró.
2018-03-04